Dos goles de falta directa del ariete, el segundo en el quinto minuto de añadido, dejó a medias la remontada maliaya. Gran segunda parte del Lealtad, que mereció más. Se resiste la primera victoria

Tercera jornada de liga en Segunda Federación. Segunda como local para un Lealtad de Villaviciosa que quería estrenar su casillero de victorias. El rival, directo no, directísimo. El cuadro cántabro del Sámano, que llegaba a la villa con cero puntos o, lo que es lo mismo, dos derrotas en dos partidos. El partido tuvo de todo, un inicio dubitativo del Lealtad, una gran segunda parte y un desenlace cruel.

El primer tramo fue de respeto, nadie quería perder y ambos conjuntos se tantearon sin dañarse. La primera clara fue para los cántabros, en el 13', tras una gran internada de Aitor Abad por derecha, centro, Berzosa que no se la esperaba y más que rematar el balón pegó en su pierna y buena intervención de Junquera. El Lealtad era víctima de fallos propios. Errores no forzados en salida y, como en el diecinueve y en un córner a favor, resbalón de Babafemo en área rival, recogió Markel Gilete, conducción tremenda desde su área hacia la rival y, cuando ya llegó muerto, chutó flojito a las manos de Junquera.

Estaba siendo superior el Sámano, sobre todo creando más peligro, y en el veinticinco otra tremenda cabalgada de Aitor Abad, centro al segundo palo, de nuevo Berzosa y mismo desenlace, paradón de Juan Junquera. Se veía venir el susto y a la media hora llegó. Falta peligrosísima para el Sámano dentro de la semiluna del área, al golpeo Ander Castillo que la reventó pegadita al palo del portero. Golazo. Tocaba remar. Antes del descanso iba a tener una buena opción el Lealtad, fue en un saque de banda al área, peinó Omar y Krehl de primeras metió la punta de la bota y el balón se fue cerca del palo. Desventaja al intermedio.

Varió Luis Arturo piezas y esquema en el descanso. Jaime Felgueroso y Saha al pasto, Pelayo Santoveña y Babafemo no saldrían. 1-4-4-2 y el Lealtad fue otro. Dos pasos adelante, el Sámano retrocedió y el premio llegó. Primero iba a avisar Omar en un cabezazo que fue manso a las manos de Hodei Oleaga y en el cincuenta y siete, jugadón de Nico Pereira por derecha, que hizo lo que quiso en la segunda parte, centro rasito en ventaja y Luis Gómez, el no quería, se lanzó a despejar y lo hizo hacia su portería. Gol en propia y empate. Crecían los leales, animaba Les Caleyes y Omar tuvo el segundo en una pelota muerta en área pequeña pero el central la reventó en un Hodei Oleaga que se hizo gigante.

Y en el setenta y tres, el segundo. Más de Nico Pereira por derecha, que dejó en el sitio a su par, centro bombeadito al segundo palo y Alex Krehl que se elevó imponente para cabecear a la red. Firmó la remontada el Lealtad. Pudo matarlo Marcos Blanco, que hizo un partido, otro más, de otra categoría con un misil desde lejísimos que reventó el larguero. Pero llegó el añadido. Gestionó mal la prolongación el Lealtad que vio como Junquera evitó el empate con un paradón tras cabezazo de Larrucea y, en el quinto y último minuto de añadido, falta innecesaria de Buer, que acababa de entrar y mismo desenlace que en la primera parte. Ander Castillo, de nuevo duro, de nuevo abajo y de nuevo gol. Tremendo jarro de agua fría.

No dio más tiempo el colegiado. Recogió el balón Junquera de su portería y el gallego señaló el final de un encuentro donde el Lealtad empezó mal, mejoró hasta merecer ganarlo y lo empató en el añadido cuando ya saboreaba los tres. La primera victoria deberá esperar.

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