Contundente triunfo del Real Avilés en su visita al Cacereño, que le permite escalar a la tercera plaza. Los blanquiazules volvieron a dejar la portería a cero y son los máximos goleadores de una categoría en la que han entrado con buen pie

0.- C.P. Cacereño: Iván; Martínez, Javi Barrio, Crespo (Santi, min.46), Joserra; Iván Fernández (Rementería, min,76), Deco (Raúl Sanchís, min.63), Diego Guti, Berlanga; Carlos González (Emi Hernández, min.46) y Diego Gómez (César Gómez, min.63).

4.- Real Avilés Industrial C.F.: Álvaro Fernández; Campabadal (Guzmán Ortega, min.46), Babin, Borja Granero, Osky; Gete, Adri Gómez; Raúl Hernández (Isi Ros, min.64), Kevin Bautista (Natalio, min.74), Berto Cayarga (Quicala, min.81); y Raúl Rubio (Javi Cueto, min.81).

Equipo arbitral: Néstor Holgueras Castellanos, asistido en las bandas por Jesús Rodrigo Gonzalo y Javier López Pascual. Cuarto árbitro: Ángel Manso Rojas. Comité castellano-leonés. Amonestó a los locales Martínez, Carlos González, Crespo, Joserra y a los visitantes Campabadal y Guzmán Ortega. Expulsó por doble amarilla al local Martínez (min.45+1).

Goles: 0-1 min.26 Kevin Bautista; 0-2 min.39 Raúl Rubio; 0–3 min.70 Isi Ros; 0-4 min. 83 Quicala.

Incidencias: Príncipe Felipe. Terreno de juego irregular. Buena entrada, con presencia de medio centenar de seguidores avilesinos.

Le salió todo bien al Avilés en el Príncipe Felipe, que vio cómo sus porterías fueron perforadas por primera vez esta campaña, aunque en todos los casos por un equipo visitante que supo sufrir cuando tocó, no perdonó cuando atacó el área rival y manejó con inteligencia los segundos 45 minutos en superioridad numérica.

El regreso de Gete al once fue la única novedad respecto al equipo que venció al Arenteiro, con Isi Ros como sacrificado. Kevin adelantó su posición, flanqueado por Cayarga en la izquierda y Raúl Hernández en la derecha.

Salió fuerte el Cacereño, pisando área en el primer minuto y presionando alto, como alto fue el número de tarjetas en los primeros cinco minutos, tres amarillas y una azul, la solicitada por el equipo local para revisar un posible codazo de Kevin Bautista sobre Diego Guti que quedó en nada.

Campabadal, que fue el amonestado visitante por la vía rápida, encontró hueco en un par de ocasiones para poner dos centros peligrosos desde la derecha, pero fue el equipo local el que más cargó el área en el primer tramo. Un disparo de Carlos González atrapado por Álvaro y un remate de cabeza alto de Javi Barrio a la salida de un córner fueron las primeras ocasiones de los locales, que le ponían intensidad y obligaban al Avilés a igualarles en la pelea para no pasar apuros.

Justo cuando más parecían apretar los verdes llegó el primer zarpazo avilesino, la jugada nació de un saque de esquina local, pero los de Dani Vidal estuvieron vivos para recuperar el balón. Osky lo puso raso y medido, atento a la llegada por el lado opuesto de Kevin Bautista, que definió con tranquilidad para hacer el 0-1 a los 26 minutos.

El Cacereño intentó responder con un cabezazo en plancha de Carlos González, despejado por Borja Granero con una pierna salvadora. Sobriedad atrás y eficacia arriba, esa fue la receta de un equipo avilesino que duplicó su ventaja en el 39, tras un buen envío de Berto Cayarga desde la izquierda, a la espalda de los centrales y encontrando la cabeza de Raúl Rubio, que por fin rompió su maleficio, un justo premio al buen trabajo del gladiador zaragozano.

Salió todo de cara para los blanquiazules en el primer tiempo, rematando con la expulsión por doble amarilla del lateral derecho local Martínez. Estuvo avispado el banquillo visitante pidiendo la revisión por una falta peligrosa sobre Raúl Rubio, que se tradujo en una segunda cartulina que dejó a los locales con diez justo al límite del descanso.

En la segunda parte el Avilés evitó sobresaltos, conteniendo a un Cacereño con un sólo punta y dos líneas de cuatro. En ataque encontró más huecos pero no hizo mucha sangre, hasta que en torno al minuto 70 el portero local Iván, que debutaba hoy, salió con mucho riesgo fuera de su área, despejando de cabeza a los pies de Isi Ros, que aprovechó el regalo para sentenciar, anotando desde lejos a puerta vacía.

Otro de los recambios, Quicala, hurgó más en la herida cacereña aprovechando el espacio para controlar de cabeza y definir con la diestra, cerrando la cuenta de un Avilés en estado de gracia que despachó un partido muy completo en tierras extremeñas.

Veinte puntos en once jornadas, tercera posición a dos puntos del líder y ocho por encima del descenso. Ni los más optimistas esperaban este rutilante arranque de los de Dani Vidal, que con tres puntos más en el bolsillo ya piensan en su próximo compromiso, será el próximo viernes a partir de las 21:15 para inaugurar la jornada ante el histórico Arenas de Getxo y soñar con dormir líderes en caso de victoria.