El encuentro entre el Fabril y La Braña, que transcurrió
con normalidad, acabó con la intervención de la Policía
Nacional tras el enfrentamiento entre miembros de los
dos equipos, la mayoría familiares de los jugadores.
La mañana del
sábado arrancó movida en Santa Cruz con el
partido del grupo 5º de Tercera Cadete entre el
Fabril C.D. y el C.D. La Braña. Un partido donde
los visitantes partían como favoritos al liderar
la clasificación y medirse a un equipo de la
zona media al que triplicaban en puntuación. El
encuentro transcurrió con normalidad. La Braña
ganó 0-2 gracias a dos goles marcados mediada la
primera mitad y no hubo expulsiones, ni más
tarjetas de lo habitual: tres para los locales y
una para los visitantes.
Lo negativo ocurrió a la finalización del
partido cuando los jugadores se retiraban a los
vestuarios. Las versiones de los dos clubes
coinciden prácticamente: un padre de un jugador
local empujó a un jugador del juvenil de La
Braña -que tiene a su hermano en el equipo
cadete- por unos comentarios hacia un jugador
del Fabril, y el padre de éste vino a
recriminárselo y se originó la tangana. A partir
de ahí llegaron al tumulto más padres y
jugadores y hubo intercambio de golpes. Un
jugador del cadete del Fabril fue a separar y
recibió una patada por detrás, por la que tiene
previsto denunciar, según informaron desde el
club local.
El colegiado no reflejó nada de ello en el acta,
pero al campo de Santa Cruz acudieron varios
coches de la Policía Nacional, que tomaron nota
de lo acontecido. Rafa Menéndez, presidente del
Gijón Industrial, lamentó lo ocurrido y tiene
previsto esperar para escuchar todas las
versiones, "pero tomaremos cartas en el
asunto. El resultado es lo que menos me importa
del fútbol base, los pilares básicos son la
educación y el respeto. Hoy pasa en nuestra casa
y otro día pasará en otro campo".
Estos incidentes no son habituales, teniendo en
cuenta el porcentaje que representan ante el
gran número de partidos que hay cada fin de
semana, pero "me
da miedo lo que ocurre en el fútbol base, vamos
a tener que estar un directivo en cada esquina
controlando porque no se puede decir nada, la
gente salta a la mínima y no me parece lógico".
Mismo mensaje traslada Luismi
Carreño, presidente de La Braña, "estamos
esperando a tener una versión oficial, porque la
Policía iba a investigar. Como haya una persona
de nuestro club involucrado lo expulsaremos del
club. No toleramos estas actuaciones en La
Braña". Reconoce
que siempre hubo algún incidente de este tipo,
pero que ahora "tienen más repercusión. Los
clubes tenemos que atajarlo porque no tiene
sentido que haya insultos a jugadores,
árbitros...".