Segunda victoria en dos duelos oficiales esta temporada para el Sporting. Las gijonesas hicieron su partido y se llevaron un merecido triunfo ante un rácano y sin mordiente Oviedo. Exhibición de Antía, otra vez.

Día de derbi en la Escuela de Fútbol de Mareo. Real Sporting y Real Oviedo se veían las caras por segunda vez en partido oficial este curso. En el precedente, triunfo sportinguista de postín en el Carlos Tartiere en eliminatoria de Copa de la Reina. Hoy, las dinámicas eran diferentes y la distancia en la tabla, abismal. El Oviedo, tercer clasificado pero en puntaje de promoción de ascenso, empatado a 24 puntos con el Europa. El Sporting por su parte llegaba penúltimo, eso sí, tras sumar una tremenda victoria en Zaragoza la pasada semana. Pero esto es un derbi y aquí no hay dinámicas. El Sporting hizo su partido, le dio la pelota al Oviedo y mató en la segunda parte. Al igual que en Copa, una superlativa Antía iba a desnivelar la balanza al rojiblanco.

La primera mitad tuvo poquitas cosas. Fue más bien aburrida, con un Oviedo con mucha posesión pero casi siempre estéril, sin crear excesivo peligro ante la meta de Adriana Sirgo, y un Sporting cómodo sin pelota, esperando sin sufrir y saliendo al contragolpe. La primera fue para el Oviedo al ocho, en un robo alto de las de Andrea Suárez, una buena combinación y pase raso atrás para el disparo de primeras de Sheila Elorza a las manos de Sirgo. La réplica del Sporting al minuto en un disparo desde fuera del área de Nuria Cueto desviado. En el dieciocho la primera clara del partido era para las locales. Robo, salida rápida y Antía que iba a avisar de lo que vendría en un mano a mano tras pared con Granda que la gallega definió muy centrado a las manos de Elena Casao. Clave María Iglesias para incomodar la definición de la “10”.

El Oviedo seguía teniendo la pelota pero se acercaba poco a área local y, cuando lo hacía, no llevaba demasiado peligro, como en un disparo de Vera Rico esquinada al palo largo que atrapó sin apuros Sirgo. Sí que la tuvo clara el cuadro carbayón superada la media hora. Fue a pelota parada en una falta frontal y lejana que puso Ana Buceta y peinó un poquito Marina Martín para que la bola se fuese rozando el palo. En la primera, nada más.

El segundo acto arrancó sin cambios y, pese a que el guión seguía siendo el de un Oviedo con la pelota, el Sporting dio dos pasitos adelante. Asustaron las azules en un apelota larga para Sheila Garrido, error de Adriana Sirgo y cuando la “9” embocó sin guardameta se encontró con la zaga del Sporting para abortar el gol. La réplica local, clarísima. Jugadón de Valbuena por izquierda, carrera de metros y metros sin oposición por el carril y disparo al travesaño.

La siguiente, gol. Antía se puso la capa, recogió en tres cuartos, ruleta, apertura a izquierda para el centro de Sonsoles, cabezazo y gol. Antía. Otra vez. La gallega volvía a facturar ante su víctima preferida y ponía en ventaja a un Real Sporting que acariciaba la segunda seguida en liga. El gol le sentó horrible al Oviedo, que a partir de ahí desapareció, y llegó el segundo. Pelota larga a la carrera de Granda, mano a mano con Elena Casao y definición ajustada, tanto que la bola pegó en el palo y al camión. Se acabó.

Al final, triunfo del Sporting en el derbi, dos de dos ante un Real Oviedo que pega un frenazo en su pelea por el ascenso, y victoria fundamental para un cuadro rojiblanco que ya ve la luz al final del túnel, aunque acabará la jornada en puestos de descenso.