Un tiempo para cada uno en Laviana donde el Vetusta tuvo opciones de sentenciar antes del descanso, y acabó pidiendo la hora. Castiello desperdició una pena máxima en el añadido que podría haber significado el empate.

1.- Real Titánico: Álex González; Álex García, Pablo Castiello, Sergio Camblor, Álex Mariscal, Jorge Barbón, Joan Vilches (Nico Martínez m. 59), Borja Vicente, "Lele" Ordiz (Mati Malasiewicz m. 59), Iván Conceiçao y Diego Sánchez (Javi Perera m. 59).

2.- Real Oviedo Vetusta: Miguel Narváez; Lamine Gueye, Marco Esteban, Adri Lopes, Martín Lavilla; Guille Castrillejo (Jordan Pereke m. 86), Rubén Valdera (Diego Tejón m. 72), Iván González (Eddey Sidi m. 86), Santi Miguélez (Nacho Estrada m. 77); Cheli Pereda y Joaquín Delgado (Óscar de la Hera m. 72).

Equipo arbitral: M. Fernández Blanco, asistido por Suárez Fuentes y Martos Amor. Delegación de Avilés. Amonestó a los locales Álex García y Barbón y a los visitantes Miguélez, Joaquín Delgado, Martín Lavilla y Miguel Narváez.

Goles: 0-1 m. 20 "Lele" Ordiz (p.p.). 1-1 m. 42 Joan Vilches. 1-2 m. 44 Santi Miguélez (p.).

Incidencias: Las Tolvas. Terreno de juego con buen aspecto, algo irregular. Mañana cubierta. Unos 350 espectadores.

Comenzó el Veusta enchufadísimo y en los dos primeros minutos de juego asedió al Titánico, llegando a estrellar dos remates consecutivos al palo de Joaquín Delgado, tras sendos centros de Lamine Gueye por la banda derecha.

Tras este primer arreón con el que casi pudo sentenciar el encuentro por la vía rápida, el conjunto local se repuso y trató tomar las riendas del encuentro. Con bastante fútbol de ida y vuelta, dispuso de tres saques de esquina para adelantarse en el marcador pero el Vetusta los defendió con solvencia.

En el minuto 20, Lamine Gueye protagonizó una nueva entrada por la banda derecha y, desde la línea de fondo, lanzó el pase de la muerte que fue introducido a gol en propia puerta por Lele al tratar de despejar en un enorme barullo en el área pequeña.

Tras el gol, el partido continuó en la misma línea con un Vetusta dominador y un Titánico que mantenía el orden defensivo y trataba de poner en aprietos a su rival con la velocidad de sus puntas.

En el minuto 40, Lele en diagonal desde la banda izquierda al centro, lanza un soberbio derechazo a la escuadra que es despejado a córner por Miguel Narváez con la mejor intervención del encuentro. En el lanzamiento de córner ejecutado por Álex Mariscal, Joan Vilches anotaba a placer, de cabeza, el empate a uno. Era el minuto 42 y parecía que el partido se iba a ir en tablas al descanso. Pero un error infantil en la zaga local, deja el balón franco para que Joaquín Delgado encare al meta rojiblanco en uno contra uno siendo derribado en un clarísimo penalti que fue transformado por Miguélez poniendo el 2-1 justo antes del descanso.

Tras el paso por los vestuarios, el partido dio un giro de 180 grados. El Vetusta se fue encerrando poco a poco dando por bueno el 2-1, mientras que el Titánico se fue creciendo y se veía capaz de dar la vuelta al marcador.

En el minuto 72, a punto estuvo Camblor de marcar el empate con un gran remate de chilena que se fue por muy poco. Cinco minutos después, en el 77, de nuevo Camblor la tuvo en el área pequeña en un córner pero el control se le fue por muy poco.

No cedió en su empeño el Real Titánico y trató por todos los medios de dar la vuelta al partido. En el minuto 93, un balón centrado al segundo palo es disputado por Iván Conceiçao y el meta Miguel Narváez. El cancerbero sale de puños pero en su salida derriba al punta lavianés señalando el colegiado penalti. Pena máxima, bastante justita y muy protestada por el equipo visitante, que lanzaría Castiello por encima del travesaño. Una parte para cada equipo en cuanto a juego e intensidad pero no logró Pablo Castiello poner el empate a dos en el marcador.

Victoria por 1-2 del Real Oviedo Vetusta que le mantiene en segunda posición a tres puntos del Covadonga. Por su parte, el Real Titánico cosecha su segunda derrota consecutiva aunque realizando un buen partido que fue reconocido por la afición con una abundante ovación al finalizar el mismo. Se coloca en mitad de la tabla con 14 puntos.

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