El cuadro vigués fue de nuevo verdugo del Llanera. Ya lo ha sido en la temporada 2021-2022 cuando ganó en el Pepe Quimarán por 2-4, el 8-5-2022 mandando al Llanera de nuevo a Tercera RFEF. Este mediodía, se llevó los tres puntos de manera inesperada e inmerecida. Pues el Llanera que marcó pronto al inicio de la segunda parte, mandó durante casi toda ella y pudo haber sentenciado antes de que se produjera los que los mismos jugadores visitantes ni imaginaban casi al final.

Por sanción de Dominique Mendy, Chuchi Collado hubo de colocar de central a Álvaro García y el puesto de éste fue ocupado por el joven canterano Izan García que cumplió con creces, Cristian García y Bayo suplieron a Lucas Suárez y Steven Prieto. Por su parte, David de Dios optó por Nacho Fariñas y Diabaté en lugar de Juan Serrano y Álex Pérez.

El partido estuvo caracterizado por la igualdad en la primera parte. En un terreno tan corto y con espacios reducidos, los dos equipos hicieron gala de una fuerte presión en medio campo con un desgaste físico notable con llegadas a las áreas pero pocas intervenciones de los guardametas.

En el primer minuto, el Llanera tuvo la gran ocasión. Triangulación Izan, Viti, Bayo por la izquierda con pase al centro de éste que Cristian no llegó por poco. Alberto Hórreo detuvo dos balones con comodidad. Después del minuto quince, el Coruxo jugó un poco más y llegaba por el ala derecha con centros que no inquietaban la portería de Alberto Hórreo. Y desde la media hora hasta el descanso fue el Llanera quien dominó. En el treinta René Reyes a media vuelta disparó duro y rechazó Ruiz Diaz a córner. A la salida de éste Leyder Trujillo chutó fuerte y detuvo el portero vigués.

La segunda parte comenzó como la primera; con la gran ocasión por parte local en el minuto cuarenta y siete, cuando Bayo en posición franca remató de cabeza fuera. Posiblemente hubiera sido la clave del partido Y dos minutos más tarde; Viti se fue de dos marcadores, pasó al centro y Cristian García empalmó a la red, 1-0.

Rompía el fuego el Llanera que continuó mandando y creando llegadas con peligro con un juego hasta preciosista. David de Dios técnico del Coruxo cambió los puntas; dio entrada a Alex Rey y Juan Serrano en lugar de B. Diabaté y Álvaro Naveira para llevar mayor peligro a la portería de Alberto Hierro, cosa que no consiguió en principio, pues el Llanera se multiplicó en acciones defensivas y en tapar huecos. No solo impidió el acercamiento al área del Coruxo, sino que llevó muy buenas acciones por las bandas mecedoras de ver asegurado el partido.

No sabemos si por casualidad o caudalidad, el caso es que Alex Rey y Juan Serrano que entraron en el minuto cincuenta y ocho han sido los autores de los goles visitantes.

Conforme avanzaban los minutos, la intensidad crecía y la emoción se mantenía. Los tres puntos para el Llanera eran más que necesarios, casi se palpaban, aunque en en el Pepe Quimarán nada está asegurado hasta el final. Y lo peor estaba por venir. Corría el minuto noventa y dos y en una de las pocas llegadas en esta parte del Coruxo, el balón se estrelló dos veces en el larguero sin que nadie acertara a despejar a pesar de haber muchas piernas de por medio y Alex Rey oportuno envió a la red; 1-1 y desolación.

Pero la cosa no quedó ahí, dos minutos después, un balón sin aparente peligro en la zona intermedia, es despejado mal por Otía, que ensombrece su sobresaliente actuación, Serrano ve adelantado a Alberto Hórreo quien no acierta a despejar el balón y tras tocarlo entra en la red, 1-2. Incredulidad y desolación aún mayores. Los jugadores locales que derrocharon un gran desgaste físico quedaron anonadados, así como la afición.

Aún hubo tiempo para que Mateo Arrellano de cabeza estrellara el balón en el poste izquierdo, antes del final de un partido en el que ni los aficionados, jugadores y técnicos visitantes no esperaban ganar. Ya casi no creían en el empate, que no hubiera sido justo, cuanto más la victoria.

Mazazo para el Llanera, que no mereció tal castigo en absoluto. El equipo queda con un punto a la espera de mejorar su casillero las próximas semanas, algo que a la vista de este partido queda claro que puede sumar. El domingo visitará al Bergantiños, donde hace dos temporadas trajo los tres puntos.

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