El equipo sénior del Riaño realizó un paro de un minuto en su
partido ante el Campomanes. El club langreano avisó de esto en la previa del
partido al conjunto visitante, que respetó su decisión y se dedicó a tocar el
balón en su campo sin atacar, en un encuentro que acabó con empate (2-2).
Marsel, vicepresidente del Riaño, indicó que esta medida se
llevó a cabo porque "estamos cabreados con las decisiones arbitrales. Cometen
errores que consideramos flagrantes". El conjunto langreano vio como
le clausuraban
su campo un partido hace unas jornadas por una tangana con el público y
creen que hay "trato discriminatorio. Vale que a veces nos metemos en charcos
que no nos tenemos que meter, pero a otros equipos no se les aplica la misma
vara de medir", sin nombrar, pero en alusión a
lo ocurrido en
el Fortuna-Camocha 'B', donde se apercibió por los incidentes al
conjunto piloñés.
En otro orden de cosas, el Riaño sigue a la espera de que un
jugador, ahora infantil de primer año, tenga su ficha tramitada. El club inició
su inscripción en agosto de 2022, hace más de un año, y el joven de ascendencia
rusa sigue sin poder jugar por diferentes contratiempos burocráticos. Un tema
que perjudica a muchos jóvenes extranjeros por las medidas estrictas de la FIFA
para "la protección de menores en el sistema de traspasos".