Tras el empate
entre el Unión Comercial y el Madalena Morcín se formó una discusión y el
árbitro recogió en el acta un puñetazo al entrenador morciniego, que presentó
una denuncia.
Unión Comercial
y Madalena Morcín empataron (2-2) en la última jornada de liga. Era un
partido intrascendente para los morciniegos, pero los locales se jugaban evitar
la séptima plaza que les puede abocar también al descenso a Primera Regional.
El encuentro transcurrió con normalidad, pero,
según cuentan fuentes presenciales, a su finalización y ya de camino a los
vestuarios, hubo un intercambio de comentarios que crisparon los ánimos. Según
recoge el acta, el entrenador del Madalena Morcín, Pablo Escobio, "le propinó un
manotazo en la cara a un jugador local, sin utilizar una fuerza desmedida y sin
que este necesitase atención médica", y el técnico morciniego recibió "un
puñetazo en la cara, sin que necesitase atención médica", concretamente en la
parte posterior de la cabeza.
Pablo Escobio presentó una denuncia por la
agresión recibida y, aunque el acta se la atribuye al jugador del Comercial,
D.G.G., no está claro quien fue el agresor. El tema está ahora en manos de la
Guardia Civil y este martes se esperan sanciones también por parte del Comité
Territorial de Competición.