El resultado final no refleja lo que fue el desarrollo del partido hasta después del minuto 55 cuando se abrió el marcador. Todo se resolvió en la segunda parte. Dos goles en dos minutos y la expulsión de Mathieu Mvondo, fueron determinantes.

Partido de gala en el Pepe Quimarán. Llegaba nada menos que el Numancia de Soria, histórico del fútbol nacional que cuenta con cuatro temporadas en Primera División. La última en 2008-2009 cuando el Llanera aún competía en Primera Regional (Ahora Segunda AF). Cuesta creer, que quince años más tarde se enfrentaran los dos clubes en competición oficial y que un exprimer divisionario, pisara algún día el Pepe Quimarán. Y es que la vuelta del Llanera a Segunda RFEF, le va a permitir unas páginas de efemérides y curiosidades históricas tales como enfrentarse a clubes exprimer divisionarios y/o representantes de capitales de provincia.

Dos equipos con objetivos totalmente distintos y en situación opuesta. El Numancia líder sin conocer la derrota y con imperiosa necesidad de subir a Primera REEF. Y el Llanera colista en busca de su primera victoria de la temporada para intentar acercarse a los puestos de permanencia.

Dos fueron los cambios introducidos por Chuchi Collado; Cristian García y Steven Prieto dejaron su puesto inicial a Bayo Mben y Alex Barrera, debutante. Alex Calle, técnico numantino, realizó cuatro incluido el guardameta Dorronsoro en vez del polaco Petr Kudakovskiy, exSporting Atlético.

No hubo fútbol. No lo podía haber. Las consabidas medidas del campo, no dejan espacio para contemplaciones y el fútbol está muy condicionado a fuertes marcajes, balones al aire y mucha presión. El balón anduvo por el aire muchas de las veces. El Numancia jugaba un poco más adelantado que el Llanera que no llegaba. Bueno, no llegaba nadie o las defensas se mostraban casi infranqueables.

Sin cumplirse el minuto de juego, un despiste de Dominique Mendy, permitió que el espigado Jony se presentara ante Hórreo que evitó el 0-1 en buena intervención. En el minuto veintiocho, Bayo Mben también se presentó solo ante Dorronsoro, que desaprovechó en una acción muy parecida a la del Numancia del primer minuto. Primera parte muy igualada, con poco fútbol donde no se pudo ver la diferencia de clasificación de uno y de otro.

Todo cambió y se resolvió en la segunda parte donde se consiguieron los goles y pasaron cosas que no se percibían en la primera mitad. En el minuto cincuenta y cinco un fuerte tiro de Cristian Dieste es repelido por Alberto Hórreo, y Jony, una pesadilla para la defensa local, a placer abre el marcador, 0-1. Dos minutos después, falta frontal cerca del área, Bonilla toca en corto a David Sanz y el balón se cuela entre muchas piernas, 0-2 y partido cuesta arriba. Y se puso más cuesta arriba, pues Mathieu Mvondo vio dos amarillas seguidas y la consiguiente expulsión, acción que creemos inadecuada por parte del jugador local.

Curiosamente y en inferioridad numérica iban a ser los mejores minutos en ataque del Llanera, ya que en el sesenta y cuatro, a la salida del segundo córner, Dominique Mendy de cabeza remató al palo izquierdo de Dorronsoro; 1-2. Un remate posterior de Jony fue desviado a córner por Hórreo. Poco después pudo empatar Kike Meaurio, pero el balón salió a córner.

Pero llegó la puntilla. La defensa del Llanera un tanto adelantada en busca del gol, no pudo impedir una jugada por la derecha de Góngora con pase al segundo palo y Jony hace el 1-3. Completó el marcador Alain Ribeiro al peinar de cabeza el tercer córner del segundo tiempo botado por el Numancia.

Un resultado final que no era esperado tal como se desarrolló la primera parte, en el que la igualdad fue la tónica general. El Numancia celebró con júbilo su nuevo triunfo que le deja más líder y el Llanera que no mereció tan abultado correctivo, sigue colista y sin conocer la victoria. El domingo repite jornada en el Pepe Quimarán ante el Salamanca C.F. UDS a las 12:00 h.