La mejor arma avilesina fue la velocidad del extremo Nacho, que cayendo a la izquierda protagonizó las dos llegadas locales del primer tiempo. En la primera, su disparo raso se topó con los guantes de Nico y en la segunda, en posición más forzada, el balón se marchó alto.

Un centro chut al poste del visitante Jaime fue lo más destacado antes de irse a vestuarios, reanudándose el partido como empezó, con posesión cántabra y un Avilés con dificultades para llegar al área contraria.

En el 52, una gran acción colectiva del Racing dio lugar al 0-2. Esta vez Tariku ejerció de asistente, dejando el balón en bandeja a Rodri para que rematase a gol en el área pequeña. Pelayo evitó poco después el tercero sacando una gran mano tras un disparo de Jaime.

El Avilés, que había cambiado el dibujo pasando a emular el 4-2-3-1 racinguista, no tiró la toalla y redujo distancias cinco minutos después con un disparo desde fuera del área de Macías, ligeramente escorado a la derecha. Primer tanto blanquiazul de la temporada.

Pero las cosas se torcieron para los locales cuando Lucas vio una rigurosa tarjeta roja directa por una entrada en tres cuartos de cancha con más de 25 minutos por delante.

Los de Luis Vega -expulsado por protestar poco después de la controvertida roja- pasaron por momentos complicados pero se rehicieron y mantuvieron en alerta a los de Sergio Matabuena. El ejemplo más claro fue un cabezazo de Marcos a la salida de un córner desde la derecha que se fue ligeramente por encima del larguero.

Aún así el Racing se mostró sólido en el tramo final y puso fin a la incertidumbre por el resultado en el 88, tras una buena transición finalizada con estilo por Morante desde la media luna del área.

El Real Avilés afronta ahora tres duelos consecutivos ante rivales asturianos, el primero en Mareo el próximo fin de semana ante el Sporting. Después será el turno de recibir al Oviedo y visitar al Veriña.

ÁLBUM DE FOTOS