Vendió cara su piel el Juvenil “A” realavilesino en su primera cita liguera en la máxima categoría, enfrente un Celta que dominó pero que tuvo problemas para traducir su superioridad en el marcador, logrando derribar el muro blanquiazul en el 89.

Los vigueses, como era de esperar, llevaron la iniciativa, con el mediapunta Hugo como finalizador en sus primeras llegadas, primero con un cabezazo a las manos del portero y posteriormente con un disparo excesivamente cruzado tras un buen envío de Aarón.

La lesión de Álex a los diez minutos fue el primer contratiempo para los locales, situándose Dani en punta, con el recién incorporado Gonzalo y Nacho a medio camino entre el extremo y el interior, formando una “caja” con los dos pivotes para incomodar a los centrocampistas visitantes.

El Celta volvió a intentarlo pero Pelayo estuvo atento, respondiendo bien tras una buena asociación entre Yoel y Hugo y tocando lo justo un disparo lejano de Mateo que llegó a tocar la cruceta.

Eso sí, la mejor ocasión de la primera mitad tuvo color blanquiazul justo antes del descanso, tras una irrupción desde atrás de Romeo, que estrelló su disparó en el poste.

No cambió demasiado la decoración en la segunda mitad, el Celta tenía más balón pero no finalizaba con acierto. Ángel fue el que más buscó puerta pero sus remates se marcharon desviados en un par de ocasiones.

El Avilés fue reduciendo paulatinamente su presencia en el área rival, una de las pocas acciones que pusieron en alerta a la defensa viguesa fue un centro desde la derecha en el que el central Noah evitó por poco el remate de Nacho.

La expulsión de Mateo a quince del final obligó a los locales a pertrecharse atrás para contener el arreón final de un rival cada vez más presa del nerviosismo por no encontrar el camino del gol.

Finalmente, con el tiempo casi cumplido y los avilesinos casi saboreando un valioso y meritorio empate, llegó la jugada que deshizo la igualada. Un centro desde la derecha pasado al segundo palo rematado por el extremo de origen rumano Ianis, que en primera instancia se topó con una gran mano de Pelayo pero que no perdonó en el rechace.

Los locales no se rindieron en el descuento, forzando un par de llegadas sin más consecuencias que un contragolpe visitante en el que Ángel hizo gala de un gran derroche físico pero de una mala definición.

La próxima cita y primera salida para los avilesinos será ante el Bansander en tierras cántabras.

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