Robi Toral adelantó al Vallobín, desde los once metros, y Valeriano empató para el Candás, mediada la segunda parte.

Partido con dos partes diferenciadas. En la primera ambos equipos se aplicaron con mayor rigor táctico, achicando espacios a la salida del balón de los contrarios, apenas se produjeron jugadas hilvanadas y las ocasiones de gol fueron contadas. Tres para el Vallobín y dos para el equipo candasino

Las tres del Vallobín tuvieron el mismo protagonista, el balón parado  y la maestría en el golpeo de Robi Toral en la ejecución de esas acciones . En la primera de las ocasiones, el lanzamiento de un penalti, en el minuto once. Pena máxima decretada por el árbitro tras una disputa en el área pequeña de un balón rechazado por alto al que  alcanzó a golpear Nacho Victorio, que en esa acción recibió un golpe en su pierna por parte de un defensor candasín que, a juicio del colegiado, empleó el pie en plancha en la disputa. Con su habitual eficacia en estas lides Robi Toral marcó el gol de su equipo, lanzando raso y colocado hacia el palo izquierdo mientras el meta Miguel se lanzaba a la derecha.

Robi Toral protagonizó también la segunda y la tercera ocasión, con el saque de una falta algo lejana que pegó en la parte superior del larguero. En la tercera, el capitán local botón cerrado un saque de esquina y a punto estuvo de conseguir un gol olímpico, pero finalmente el balón, una vez había superado cualquier oposición de portero y defensores rojiblancos, acabó estrellándose sobre la cruceta.

Por su parte el Candás, apoyado en los robos de balón  en el centro del campo de Adrián Fuertes, tras el gol encajado tuvo más presencia en el campo de los naranquinos y logró hilvanar un par de rápidos contrataques en los que a los delanteros candasinos, con todo a favor, les faltó acierto rematador, sobre todo en la primera de esas ocasiones , en la que Víctor Iglesias , en inmejorable posición, cruzó en exceso su disparo enviando el balón fuera.

En el segundo período el partido fue uno de esos que  desesperan a los entrenadores. Se perdió en ambos equipos el rigor táctico y abundaron las imprecisiones en el pase, lo que dio lugar a un toma y daca continuo en el que ambas delanteras se alternaban en peligrosas llegadas al área que obligaron a emplearse a fondo a las respectivas defensas y porteros. De este toma y daca salió más beneficiado el equipo candasín  que evitó volver a encajar gol con las buenas intervenciones de su meta, sobre todo en dos ocasiones, una a disparo de Forlano y otra en una llegada de Abel Piñón que no pudo librar la oposición del meta  Miguel y  de su compañero Marco.

Además los pupilos de Dani Sevas, que obligaron a emplearse a fondo al meta Rubén, vieron recompensado su esfuerzo atacante en el minuto sesenta. Rubén rechazó en primera instancia, en una gran intervención, un disparo raso y ajustado a su palo derecho tras el saque de un libre directo, ese balón tras varios rechaces poco afortunados  acabó cruzando el área para caer a los pies de Valeriano que remató certero al fondo de la portería azulona consiguiendo el gol que igualaba el marcador.

Desde ese minuto del empate hasta el final del partido ambos equipos empujaron en busca del gol que les diera los tres puntos, pero las imprecisiones en los pases dificultaron la consecución de ocasiones claras frente a la portería y el marcador se mantuvo inalterado  hasta que el árbitro gijonés Iraquí Rato señaló el final de la contienda.

Con este resultado el Vallobín se sitúa con 50 puntos en la séptima posición de la tabla, a cuatro puntos del quinto clasificado, el Roces y a dos del sexto, el Siero. Por su parte el Candás, con 36 puntos, ocupa la decimocuarta plaza, siete puntos por encima del At. Lugones, que decimoséptimo, ocupa la primera plaza por encima del descenso, a expensas de los movimientos que se produzcan entre Segunda y Tercera RFEF.

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