El conjunto luanquín encajó al filo del descanso el gol inapelable de Neco Celorio. En el transcurso de la primera mitad se lesionaron Sandoval y Lorea y en el 88' fue expulsado Mena. Los azules quedaron muy descontentos con el arbitraje de Sebastián Roberto Pricopi.

Quedan tres jornadas y el Marino sigue dependiendo de si mismo al gozar de una ventaja de dos puntos sobre el descenso directo y el puesto de play off por la permanencia. Ante el filial del Racing de Santander, el cuadro luanquín se esforzó, tuvo ocasiones para evitar la derrota, botó más de una docena de saques de esquina, pero al final decidió la calidad puntual del jugador zurdo Neco Celorio.

Capítulo a tener en cuenta es la consideración sobre el arbitraje de Pricopi. Errores de bulto en muchas de las apreciaciones, mal ayudado en las bandas por sus auxiliares y todo ello, teniendo en cuenta que no hubo jugadas puntuales que suscitasen polémica en ambas áreas.

Hubo buen ambiente de público en Miramar, con muchos niños entre los aficionados. La alineación del conjunto local fue la prevista y el juego estuvo detenido seis minutos al inicio tras un choque entre Marco y Cuesta en el que el jugador cántabro se llevó la peor parte, pero pudo continuar tras unas curas.

En el 18' tras un centro chut de Lora, Palomeque cabeceó y el meta Dani se encontró el balón. El mejor jugador visitante, Bustillo mandaba fuera en el 25'. Cuesta fue un incordio siempre y puso un balón a Lora que marró una clara ocasión, lanzando alto en el 37' y en el 43', Neco Celorio sacó su pierna izquierda a pasear y coló el balón por la primera escuadra superior del portal defendido por Dennis.

Sandoval se marchó lesionado en el quinto minuto de añadido y Lorea ya no salió al inició del segundo periodo, al parecer también por lesión. Jandro y Abraham ocuparon sus sitios. En la segunda mitad hubo ocasiones para Abraham, Jandrín, Cuesta y Diego. Del otro lado, Quicala y Bustillo tuvieron las suyas. En el 76' hubo otra muestra más del mal arbitraje. A Guaya le agarraron por la camiseta, ni árbitro, ni linier lo vieron y la jugada acabó en una clara ocasión de Santamaría que salvó Dennís y en tarjetas para Guaya y Cuesta.

Dos corners botados desde la izquierda por Diego Díaz crearon sendos peligros y en el 88', Mena vio la cartulina roja directa, según reflejó el acta por insultar a un rival (Quicala), cuando este se marchaba sin prisa del campo al ser sustituido. Mena le empujó y en los próximos días se conocerá la sanción.

Una contra llevada por Isaac puso el último susto del día para este Marino que volverá a jugar como local, el próximo domingo a las 18 horas, ante el Zamora.

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