El árbitro del Navia - Narcea paró durante nueve
minutos el partido por insultos al trío
arbitral. El club local colaboró para que
cesasen y se reanudó sin incidencias.
Imagen de archivo del
campo de El
Pardo.
El partido de Segunda AF celebrado en la tarde del domingo entre Navia y Narcea,
dos equipos que pelean por jugar la fase de ascenso a Primera AF, estuvo
interrumpido en el minuto 83 durante nueve minutos.
El marroquí Driss Boudden Fadili era el
colegiado del partido y uno de sus asistentes era su hijo, Hamza Boudden Fatihi,
menor de edad. El encargado de la contienda, que lleva bastantes años en Asturias
y en el colectivo arbitral, activó el protocolo contra la violencia verbal en
primer lugar por un comentario de un aficionado local que le dijo al asistente "¡pero qué
levantas puto moro de mierda!" y avisó a la delegada del Navia, que reubicó
al aficionado en otra parte de campo y le pidió que cesase en sus comentarios.
Tras un par de minutos, el partido se reanudó,
pero en el minuto 83 se produjo una retahíla de insultos desde otro sector del
público, también procedente de aficionados locales, y el árbitro comunicó a los
capitanes y delegados la decisión de parar el partido y retirarse a los
vestuarios.
Desde la megafonía se pidió que cesasen los insultos y, tras casi nueve minutos de espera, con incertidumbre por la escasez de luz, se pudo
reanudar el partido sin incidencias, que acabó con victoria local por 2-1.
El colegiado reflejó en el acta todo ello y
destacó el papel colaborativo del presidente del Navia, David Álvarez, que les
pidió disculpas por lo ocurrido y habló con la grada para que cesasen los
insultos. "Había más gente de la habitual en el campo y fui a la zona a explicar
la situación para que se calmasen los ánimos. Desde el Navia C.F. rechazamos
todo tipo de agresión verbal, tanto en tono racista o cualquier otro".
Este incidente, protagonizado por una minoría
de los 350 espectadores que acudieron ayer a El Pardo, le ocurrió a este árbitro
en otros campos recientemente. David Álvarez destacó que
desde que es presidente del Navia "no hubo ningún altercado
en El Pardo. Les pedimos disculpas y acordamos no llamar a la Guardia Civil
porque las dos partes decidimos que no era necesario. Desde el club condenamos
lo ocurrido y mostramos total colaboración con los árbitros".