El equipo burgalés se adelantó en el marcador a los diez minutos, pero el cuadro luanquín volteó el marcador y llegó con un 3-1 al descanso, con goles de Adolfo, César y Lora de penalti. Los de Sergio Sánchez salen de los puestos de descenso.

Todo el entorno del Club Marino había marcado como de partido decisivo la visita del colista la Arandina. El encuentro no empezó bien, pero acabó de la mejor manera. Los tres puntos dan vida a los azules, les sacan de los puestos de peligro, igualados al Fabril que marca el puesto de promoción por la permanencia, y además lograron romper, en parte, la excesiva sequía goleadora.

Esta fue la primera vez en lo que va de campaña en la que el equipo gozoniego marca más de dos goles, pasa de este modo a los dos dígitos en su casillero anotador. Adolfo se estrenó como goleador en partido oficial y el juvenil Javi Pumarino tuvo sus primeros minutos en Segunda RFEF con el equipo.

Fue la menor afluencia de público a Miramar en lo que va de temporada y es que para muchos resultó incompatible poder asistir al partido e ir a la Iglesia de Santa María de Luanco a despedir a Ricardo García "Richar". Todos y sin lugar a dudas el fallecido Richar también, hubiesen firmado un triunfo así para cerrar el año deportivo. A los diez minutos tras un centro lateral, una prolongación de Frodo y un rematé de cabeza de Fernando llegó el 0-1. La desilusión pareció asomarse, pero la reacción no se hizo esperar. Adolfo que realizó un gran partido había tenido una ocasión en el 7', pero en el 16' acertó.  Recibió de Nacho Matador y tras un buen gesto, golpeó desde la frontal, para marcar el 1-1.

La Arandina flojeó en defensa y su portero Roberto se empleó ante los disparos de Grande y César, en el 18' y 19'. Fue precisamente César García, pleno de confianza, el que se atrevió a un disparo lejano que se coló por la primera escuadra superior. Golazo para el de Castañeda que poco después tuvo que retirarse por molestias en su rodilla izquierda. Palomeque ocupó su sitio.

En el 44', Borja que empezó como central y por ese momento estaba de lateral, tras la marcha de César, se internó en el área. Cabral le derribó, el colegiado señaló penalti y los jugadores de la Arandina comenzaron a perder los nervios. Primeras tarjetas amarillas para los jugadores burgaleses, Lora marcó el 3-1 desde los once metros y llegaron más tarjetas para los visitantes. Carlos Zazu vio dos seguidas y su equipo se quedó con diez jugadores.

En la segunda mitad, el cuadro luanquín entendió lo que requería el juego. Los azules tuvieron la pausa necesaria, manejaron el balón, procuraron siempre amplitud y así la Arandina cansaba más y hacía poco daño. Ayoub con un disparo alto y un libre indirecto dentro del área local fueron puro espejismo. Sin prisas pudo llegar el cuarto gol, en el 65', tras un buen remate de cabeza de Grande que rechazó el meta Roberto. Habría más. Una buena jugada de Adolfo, la culminó Lora con un remate que salió fuera y poco después en el 66', Grande remataba de cabeza al larguero. En el 70' Matador remató fuera.

Sergio Sánchez tuvo que completar el banquillo con tres juveniles, había hecho el cambio obligado de Palomeque por César a la media hora, dio entrada a Hugo Salinas e Iván Elena, este último tras haber estado aquejado de gripe la presente semana. Casi al filo del 90' Javi Pumarino tuvo sus primeros instantes en la Segunda RFEF. Sandoval se vistió y estuvo en el banquillo por primera vez esta temporada.

El Marino venció, descansará hasta el día 26 de diciembre y tratará de recuperar a algunos, dentro de ese número demasiado alto de futbolistas lesionados. No se descartan movimientos para el mercado de enero en esta plantilla de veinte futbolistas, tras las marchas de Canella y David Iglesias. Como cierre de la primera vuelta espera un Covadonga - Marino, vital para ambos. La Arandina vive su resaca de la Copa del Rey, tras eliminar al Cádiz y aguarda ahora la visita del Real Madrid el próximo 6 de enero (21:30 h.).

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