Los carbayones mandaron en el marcador casi de principio a fin ante un Sporting que, tuvo sus opciones, pero, sucumbió ante la eficacia en las áreas del Oviedo. Los de Paco Fernández finalizan la primera vuelta colíderes.

La abrumadora superioridad clasificatoria del Oviedo, segundo -empatado con el líder Celta- y con catorce puntos más antes de que arrancase el partido, no se palpó con tanta claridad sobre el terreno de juego, en un derbi que fue muy disputado y con ocasiones en las dos áreas.

Pero que el Oviedo tuvo controlado el partido en todo momento y no vio peligrar su victoria, gracias a las buenas intervenciones de Pelayo Calleja, que controló muy bien su área, del trabajo de "Cheli" Pereda en la medular, que se fajó de principio a fin, y de la falta de pegada de un Sporting que fue más combinativo, colgó muchos centros al área y puso en apuros a los azules, pero sin el acierto necesario para poder competir a los de Paco Fernández, que encadenan tres victorias consecutivas y nueve partidos sin perder.

El partido se le puso de cara pronto al Oviedo, que avisó en el 12' con un buen tiro de Pablo Agudín que despejó un defensa a córner. Un minuto después llegó el gol de Pelayo García, que aprovechó un rechace de Damián, tras un remate suyo, para enviar el balón a la red.

El goleador sufrió un pinchazo en la jugada del tanto y tuvo que ser sustituido por molestias musculares. En su lugar entró Martín, que ocupó el extremo izquierdo, pasando Pablo Agudín a la derecha.

A partir del 0-1 se fue incrementando el dominio del Sporting, que tenía más la pelota, ante un Oviedo firme defensivamente. El partido era intenso y con llegadas a las dos áreas y ambos equipos finalizaban las jugadas con remates desde media distancia, aunque daba mayor sensación de peligro el Oviedo.

En el minuto 25 hubo un disparo de Abel Fernández, tras una parada de Pelayo Calleja a tiro de Santi, que se marchó por encima del larguero. Pero fue el Oviedo quien amplió su ventaja, en un penalti por derribo de Borja Montes sobre Coballes que el colegiado no dudó en señalar. Adri Fernández lo convirtió con un disparo raso, a su izquierda.

No bajó los brazos el Sporting, que recortó diferencias en el 38' tras un centro de Abel Fernández que cabeceó Mau Medrano, libre de marca en el corazón del área, donde no pudo llegar Pelayo Calleja. El meta oviedista tuvo que intervenir en el añadido para blocar un disparo de Abel Fernández desde la frontal.

La segunda parte comenzó con una llegada a cada área, avisó el Oviedo con un tiro de Coballes que atajó Damián y un remate forzado de Tzalo que paró Pelayo Calleja.

Otro penalti claro, por derribo de Santi sobre Coballes, supuso el 1-3 que a la postre fue definitivo. El pichichi azul, Jaime Coballes, cogió poca carrerilla y, con mucha seguridad, envió el balón a su derecha, donde no pudo llegar Damián. El '17' oviedista pudo marcar el cuarto tras una buena maniobra de Pablo Agudín, en el 58', pero su remate se marchó alto.

No hubo dominador claro en el segundo tiempo, que fue un quiero y no puedo del Sporting ante un Oviedo que manejó bien su renta sin pasar apuros, aunque los rojiblancos tuvieron dos buenas opciones para marcar; Medrano, tras un centro desde la izquierda, y Collado, tras un centro de Contreras, desde la derecha. El primero lo atajó Pelayo Calleja y el segundo se marchó desviado por poco.

Se llegó al final del partido con deportividad, por parte y parte, y hubo celebración oviedista por todo lo alto en el vestuario del campo nº 5 de Mareo, donde se escuchó la ya popular canción del Combo Dominicano, "quién le dio mi número al alcohol", que utiliza el Sporting para sus celebraciones. Celebración bien merecida de los de Paco Fernández, que cuajaron una primera vuelta sobresaliente (2º con 36 puntos) y que casi duplican la puntuación del Sporting (7º con 19 puntos).

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