En un partido con un marcador final más propio de una competición de fútbol sala, los espectadores que lo presenciaron seguramente se divirtieron con el festival de goles, tanto como seguramente se enojaron los técnicos de ambos equipos por la endeblez defensiva que mostraron los jugadores bajo su mando.

El balón apenas rodaba por la parcela central y tan pronto estaba en un área como la contraria, las ocasiones de gol abundaron por parte y parte y el desequilibrio en el marcador a favor de los locales fue el resultado de su mejor acierto rematador y de la buena actuación de su guardameta.

En el equipo local su capitán, Raúl, se aprovechaba de encontrarse la mayoría de las veces libre de marca entre las líneas defensivas del equipo ovetense, para generar continuas llegadas con peligro de gol. De él partió la jugada del primer gol ,en la que se aprovechó de una pérdida de balón en la zona defensiva de los naranquinos para internarse en el área y ceder un balón franco para el remate a Jandro , que no desaprovechó la ocasión de inaugurar el marcador. Pocos minutos más tarde el propio Raúl recogió un rechace en medio campo, se internó libre de marca y enganchó un soberbio disparo desde fuera del área para lograr el segundo de su equipo. No tardaría más que cinco minutos el Vallobín en reducir distancias en el marcador, Abel Piñón escorado en el área de los blanquinegros recibió un buen servicio de Dani Suárez, recortó a su par y cruzó un disparo inalcanzable para el buen meta local Javi. Ya casi a punto de llegar al descanso un nuevo fallo defensivo del equipo ovetense, que vistió su segunda equipación de color verde, permitió a Pelayo obtener el tercero de lo locales.

Los cambios introducidos por Abel tras el descanso, con la inclusión de Robi Toral y Litos elevaron las prestaciones atacantes de su equipo pero no corrigieron las lagunas defensivas mostradas en la primera parte y si mal había acabado esa primera parte para los discípulos de Abel peor empezó la segunda, a los dos minutos Jandro se aprovecha de una pérdida de balón en la medular ovetense y a punto de pisar el área consigue armar un disparo inalcanzable para el meta Rubén, llevando el 4-1 al marcador. Siete minutos después Robi Toral aprovechaba un buen servicio de un compañero y remataba certero a gol adelantándose a defensas y portero en el primer palo. El Vallobín siempre que llegaba a área de los locales generaba ocasiones de gol, pero en última instancia, si no fallaba en el remate, se encontraba con las buenas intervenciones del meta local, muy seguro toda la mañana. Pero lo que más perjudicó al equipo naranquino fue la mala actuación en el plano defensivo, con pérdidas de balón en zonas comprometidas, lo que siguió lastrando a los azules en su ímpetu por acercarse en el marcador , y así vieron de nuevo como un fallo en defensa fue aprovechado por Pelayo en el minuto 66 para conseguir su doblete y no ser menos que su compañero Jandro, poniendo de nuevo una distancia importante en el marcador.

Pese a ello el Vallobín no cejó en el empeño de acortar distancias y sería Gardel , en las postrimerías del encuentro , en un remate cercano de cabeza, el que marcaría el tercero de su equipo, que , a la postre, sólo sirvió para maquillar un poco el resultado negativo que obtuvieron en su vista a La Isla.

En resumen merecida victoria de los pupilos de Chus Hevia, que se aprovecharon de la endeblez defensiva mostrada por sus rivales.

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