La Fresneda y Vallobín empataron sin goles en un partido disputado.

Los 25 grados que marcaba el termómetro a la hora de inicio del encuentro, las 13 horas, en un día completamente despejado y sin viento, la alta intensidad del mediodía solar sumada a la humedad del césped recién regado provocaba una sensación térmica superior a los 30 grados. El bochorno ambiental añadido al escaso rodaje competitivo de ambos equipos condicionó el choque, que fue tan emocionante como poco vistoso. Algo que deberían tener en cuenta los equipos -dentro de sus posibilidades- a la hora de fijar los horarios cuando se pronostican altas temperaturas como en el día de hoy.

En cuanto al juego presenciado se puede decir que el Vallobín cedió la iniciativa a los locales, manteniendo una línea de presión baja, y lo fió todo a un fútbol dominado por largos desplazamientos del balón buscando la velocidad y habilidad de Abel Piñón y Carlos Hernández, a los que, en muchas ocasiones se sumaba el joven Álvaro Colmenero.

En el primer tiempo sólo hubo dos ocasiones de gol reseñables, la más clara a cargo de Colmenero que, en el minuto 10, recibió una gran asistencia de Abel Piñón que le dejó sólo ante el buen meta local Santi Marcilla, pero éste le ganó el mano a mano al delantero azul con una gran intervención y evitó un gol que casi se cantaba en las gradas. A la media hora de partido llegó la ocasión para los locales cuando un balón suelto tras un rechace en la parcela central fue recogido por Alejandro que se adentró unos pasos en campo contrario y lanzó un intencionado disparo por alto que estuvo a punto de convertirse en gol pero el balón , tras vencer la estirada de Rubén, se escapó unos centímetros por encima del larguero.

En la segunda parte no cambiaron los planteamientos y aunque no se vieron jugadas de calidad, si hubo varias ocasiones de gol. Las más numerosas las creó el equipo local a base de disparos lejanos muy intencionados que obligaron a Rubén, que se mostró muy seguro todo el encuentro, a intervenir varias veces con mucho mérito. Por su parte, en el Vallobín fue Colmenero el que , en dos ocasiones, se adentró en el área local en buena posición de remate tras desplazamientos largos y precisos de Diego Mon, pero sus disparos salieron desviados.

En resumen: partido poco vistoso típico de las primeras jornadas de competición y reparto de puntos que, por lo ofrecido por ambos conjuntos en contienda, pareció justo. A pesar de ser un encuentro en el que los jugadores compitieron con mucha deportividad el colegiado mostró tarjeta de amonestación a los preparadores de ambos equipos y al delegado del equipo naranquino.

En la próxima jornada La Fresneda repetirá como local ante el Mosconia y el Vallobín repetirá como visitante ante el Andés .