Tres puntos y tranquilidad, que puede ser ya casi definitiva. El Oviedo enlazó
su segunda victoria consecutiva y se asienta en la zona media, continuando
además con la mejoría a nivel colectivo y también individual de varios
jugadores. Los azules se impusieron por la mínima, y no sin sufrimiento, al Lugo
en un partido de dominio local, donde la falta de precisión en los metros
finales evitó un triunfo más sosegado.
Álvaro Cervera recuperó efectivos para la convocatoria y volvió a emplear el
1-4-2-3-1, introduciendo el cambio esperado, el regreso de Lucas Ahijado al
lateral diestro en detrimento de Luengo.
El Oviedo salió intenso, llevando la iniciativa y jugando en campo rival. Pronto
llegó la recompensa y en el minuto 6, Enrich cabeceó un buen centro de Lucas en
el primer palo, anticipándose a la marca de Xavi Torres. Un gol con suspense que
necesitó confirmación del VAR por una ajustada posición de Hugo Rama en una
acción previa.
A partir de ahí se fue diluyendo el Oviedo, que perdió intensidad, adoleció de
precisión en el último pase y se mostró relajado en la faceta defensiva,
permitiendo varios intentos de contras de la rápida pareja de atacantes del
Lugo. Los gallegos avisaron en el 17' tras un despeje de Costas que voleó Andoni
López, golpeó en Calvo y se marchó a córner.
Dominaba el Oviedo, pero sin precisión para generar ocasiones y tan sólo lo
intentaba por mediación de un activo Viti, impreciso en el centro. Aunque los
azules pudieron aumentar su renta en el minuto 20, tras un buen pase picado de
Borja Sánchez por encima de la defensa para Lucas, que cedió gentilmente a
Enrich, pero el remate del ariete lo despejó a córner Whalley con una buena
parada. El delantero balear perdonó el segundo, pero cuajó una buena primera
parte en la que, además del gol, se mostró muy participativo.
El Lugo empata desde los once metros
El exoviedista Josep Señé -que fue aplaudido en la segunda parte en el momento
de su sustitución- remató de forma acrobática, un centro desde la derecha, y el
balón golpeó en el brazo de David Costas, que lo tenía en posición antinatural.
El VAR entró en juego y el árbitro acudió a visionar la jugada, decretando la
correspondiente pena máxima que convirtió Xavi Torres, devolviendo las tablas al
marcador y enmendando el error del marcaje en el 1-0. El ex del Sporting engañó
a Quentin Braat y envió el balón por el palo izquierdo de la meta local.
No consiguió hacerse con el control el Oviedo en la segunda parte y Cervera no
dudó en intentar dar un vuelco a la situación con un triple cambio. Camarasa,
Vallejo y Moro entraron en lugar de Koba, Borja Sánchez y Hugo Rama. Tres
jugadores que no rindieron a la altura en un día como hoy donde tenían que sacar
a relucir su calidad.
Triple cambio para romper la maldición
El Oviedo pasó a jugar con dos extremos rápidos como Viti y Moro, con Enrich
como referencia y Manu Vallejo como acompañante. El cambio surtió efecto casi de
inmediato y a los tres minutos se adelantó el Oviedo gracias a un buen centro de
Lucas Ahijado para Manu Vallejo, que fusiló a Whalley.
Este gol sirvió también para poner fin a la sequía de goles de un Oviedo que
no marcaba más de un gol en un partido de liga desde el 29 de mayo de 2022,
en la última jornada de la pasada temporada ante el Ibiza (3-2). Casi un once
meses después.
Expulsión de Gui Guedes
Cuatro minutos aguantó sobre el campo el jugador del Lugo, Gui Guedes, que vio
la roja directa por clavarle los tacos en la pierna a Luismi, en una disputa de
balón a la que llegó tarde. El árbitro no lo dudó y le mostró la roja.
El partido entró en una fase de interrupciones y con ventaja para el Oviedo e
inferioridad numérica del Lugo no hubo riesgos para la victoria de un Oviedo que
pudo sentenciar en el 76', tras un buen centro de Raúl Moro. El atacante cedido
por la Lazio se mostró muy activo, buscó el uno contra uno y entró mucho en
contacto con el balón, al igual que Vallejo y Camarasa, que le dieron lo que
necesitaba al equipo.
Ovación y posible lesión de Viti
El lavianés tuvo que ser atendido y sustituido a renglón seguido por Mascarenhas,
que jugó los últimos minutos como extremo diestro. El Tartiere ovacionó al
extremo, que no estuvo preciso con el balón, pero que trabajó mucho y fue
desequilibrante, una vez más.
Con estos tres puntos, el Oviedo se asienta en la zona media con 46 y ya tiene
once de ventaja sobre el descenso, a falta de que se complete la jornada. Los
azules volverán al trabajo el martes a las diez y media, para comenzar a
preparar el partido del próximo sábado (21:00 h.) ante otro rival casi
descendido como el Ibiza, penúltimo clasificado.