Nuevo paso adelante del Real
Avilés en la lucha por el playoff, hubo que esperar al añadido
para certificar una victoria trabajada ante un Valladolid
Promesas que se presentaba dos puntos por encima y con la
credencial de máximo goleador del grupo.
La suplencia de Morcillo fue la única novedad
en el once de Cañedo, que dio la oportunidad de jugar juntos a Rodri y Mayorga,
formando una jóven y prometedora línea defensiva junto a Javi Fontán e Iván
Serrano.
Ambos equipos salieron con respeto mutuo pero
fieles a su estilo, avisó el Avilés con un remate mordido de Alorda y replicó
Manu Pozo con una lanzamiento alto desde la frontal tras una recuperación de
Arroyo por la derecha.
Emilio Cañedo y Julio Baptista
El filial blanquivioleta no se
arrugó ante el gran ambiente y la entidad del rival y ejerció una presión alta
que incomodó la salida de balón del Avilés. La defensa comenzó sufriendo algo
más de lo habitual por alguna pérdida que no fue a mayores y por la presencia
física de Cedric, que mantuvo un intenso duelo con los centrales.
A la media hora el Avilés pareció
dar un paso adelante, con Isi Ros como principal baza en la banda izquierda,
forzando faltas y tarjetas, incluso menos de las debidas. Un centro chut desde
la banda contraria de Jorge, desviado a saque de esquina por Kike Ríos, fue la
ocasión más reseñable en una primera intensa y emocionante pero sin tiros entre
palos.
Comenzó la segunda con bastante
disputa en el centro del campo y el Avilés incrementando paulatinamente su
dominio. En una de sus primeras llegadas se pidió penalti, tras un disparo de
Natalio desde la frontal que impactó entre el cuerpo y la mano de Kike Ríos.
Los pucelanos fueron reduciendo
su presencia ofensiva y sus intentos se limitaron a dos disparos lejanos de Íker
Pérez y Cedric, que no inquietaron en exceso a Davo.
El Avilés siguió proponiendo más y casi todos
los caminos llevaban a la izquierda, donde Isi Ros generó varias situaciones de
peligro. Primero con un centro chut que rozó el poste y poco después con un pase
atrás para César García, cuyo remate lo salvó Kike Ríos sobre la línea.
Tanto César como Pablo Espina tuvieron una
importante participación en las últimas acciones de ataque avilesinas en busca
del premio, y finalmente lo iban a conseguir al borde del 90. El ovetense apuró
un centro desde la derecha y Fran López, en su intento de impedirlo, se deslizó
con las manos ligeramente levantadas. El árbitro se fue directo al punto de
penalti y el propio Espina ejecutó sin titubeos, a la derecha y fuera del
alcance de Yari.
Delirio local y pequeño descontrol en los cinco
minutos de descuento, con Isi Ros danzando por todo el campo con la pelota
pegada al pie y generando la última acción que daría origen al segundo gol.
César percutió hasta la línea de fondo por la derecha encontrando a Espina en el
centro, entre portero y defensa bloquearon su fuerte chut pero Primo estaba en
boca de gol y remachó la victoria.
El Avilés vuelve a encadenar dos
triunfos, sigue firme como local y se sitúa cuarto superando a los
vallisoletanos. Con la afición reenganchada por completo, se espera un nuevo
desplazamiento masivo para la cita del próximo sábado a partir de las 18 horas
en Laredo. Diego Baeza ya ha anunciado buses gratuitos y tiene toda la pinta de
que la respuesta de los aficionados será similar a la de la cita de Torrelavega.
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