El Oviedo
se reconcilió con la victoria a domicilio, donde no ganaba desde el 30 de
noviembre (Tenerife 0-1). Los azules se impusieron a uno de los equipos que
trata de salir de la quema como el Málaga, en un partido con dos tiempos bien
diferenciados. La primera mitad estuvo igualada, con pocas ocasiones, la más
clara de Bastón, y la segunda fue de claro dominio del Oviedo, que dio un paso
adelante y se adelantó por mediación de Vallejo, que estrenó titularidad con
gol.
Cervera
introdujo dos cambios en el once respecto al equipo que perdió ante el
Villarreal 'B' (0-1). Mangel y Leo Sequeira dejaron su sitio para Luismi, que
volvía tras un partido de sanción, y Manu Vallejo. El atacante gaditano jugó
cuatro minutos el pasado sábado y hoy fue elegido para ser de la partida como
acompañante de Bastón, desplazando a Koba a la izquierda.
Enfrente
un Málaga que, pese a su delicada situación clasificatoria, sacó un once de
garantías plagado de jugadores de caché en la categoría.
La
primera parte fue un sopor para el espectador. Los dos equipos justificaron
desde el inicio su posición en la tabla, vigésimo y decimoquinto
respectivamente, y no fueron capaces de hacerse con la manija en un partido con
poco fútbol, sin dominador claro y con contadas llegadas a las áreas.
No había
precisión en el pase, ni desborde, y los porteros fueron meros espectadores. Tan
sólo cabe destacar alguna acción aislada de Lago Junior, que fue el mejor de los
locales; el extremo filtró un buen pase en el 14' que culminó Rubén Castro sin
consecuencias.
El Oviedo
aguardaba con paciencia su oportunidad y en el 25', Viti le robó la cartera a la
aparsimoniada defensa del Málaga, pero su remate se marchó por encima del
travesaño. La más clara llegó en el minuto 40, tras una buena recuperación de
Jimmy, que se asoció con Vallejo y éste con Bastón, pero el delantero se escoró,
remató con la zurda y despejó Yáñez con los pies. Poco después se lesionó
Bastón, al que sustituyó Enrich poco antes del descanso.
La
decoración cambió en la segunda parte. El Oviedo dio un paso adelante, presionó
más arriba y creó muchos problemas a un necesitado Málaga que fue incapaz casi
de salir de su propio campo.
Pellicer
movió ficha e introdujo un doble cambio justo antes del gol de Manu Vallejo.
Fue tras un saque de banda de Lucas Ahijado, Sergi Enrich se la dejó de tacón
para que centrase desde línea de fondo y el gaditano se anticipó bien a su
marca, en el corazón del área, para cabecear en plancha el balón a la red.
En el gol
resultó expulsado el central local Esteban Burgos, por sus protestas, por lo que el
Málaga tenía media hora para intentar marcar, al menos un gol con diez. Pero el
Oviedo no dio opción, fue valiente y siguió jugando en campo rival, generando
opciones a balón parado. Luismi, Moro y Enrich tuvieron ocasión para ampliar la
renta de los de Cervera.
A pesar
de la necesidad local, el Oviedo supo no pasar apuros y logró tres puntos que
espantan cualquier fantasma de un posible acercamiento a la zona de descenso. A
falta de que se complete la jornada, el Oviedo es undécimo con 34 puntos, a
siete del Granada que es sexto, y ocho por encima de la zona de descenso que
marca la Ponferradina. La
próxima cita para los azules será el domingo (Nuevo Carlos Tartiere - 16:15 h.)
ante el Burgos.