Malestar general en el fútbol base del Atlético de Lugones, donde la mayor parte de los entrenadores de los equipos amenazan con dimitir si no lo hace el presidente Guillermo Fernández.

El Atlético de Lugones atraviesa un momento delicado. David Prado, entrenador de los equipos prebenjamín y alevín, que presentó su dimisión como coordinador de pista y alevines hace un par de semanas, y Benjamín Llaneza, socio y exentrenador del fútbol base, aseguran que los responsables de los equipos Minibenjamín A y B, Prebenjamín A, B, C y D, Benjamín B, C y D, Alevín A, B, C y D, Infantil A, Cadete A y Cadete B han trasladado al presidente del club, Guillermo Fernández, que dimitirán tras los partidos correspondientes a la jornada de este fin de semana si no lo hace él.

En las últimas horas emitieron un comunicado informando a los padres de los motivos para presentar este órdago al presidente del club, Guillermo Fernández, porque consideran que "no se trata a todos los equipos de la misma forma" y buscan un cambio en la gestión "para que mejor el funcionamiento del fútbol base y del regional. Queremos que dimita y que haya unas elecciones". Entre sus demandas comentan que hubo problemas con la ropa, que no hay agua caliente en los vestuarios de la pista y falta de material, motivo por el que indican que en el último año y medio "se han ido muchos jugadores y varios entrenadores". Señalan que hay entrenadores que llegaron esta temporada que aún no tienen ropa la ropa del club, que los del año pasado siguen con la misma y que el Lugones vendió las equipaciones de la pasada temporada a los jugadores en verano y que están teniendo que ir a jugar con esas en el curso actual. David Prado recalca que el Lugones es uno de los clubes más caros de Asturias en fútbol sala, "cobran 36 euros al mes a los jugadores tanto de pista como de campo, y las entradas valen 3 euros en la pista".

Ambos recuerdan una reunión que hubo a finales de septiembre con varios puntos a tratar para mejorar las condiciones, "Guillermo nos prometió que iban a cambiar las cosas y le dimos un margen de tiempo, pero no se ha cumplido nada y las cosas siguen igual o peor". Durante una semana, los técnicos hicieron un paro en los entrenamientos y no planificaron tareas en señal de protesta allá por el mes de octubre.

Benjamín Llaneza afirma que se sumó al proyecto con Guillermo como presidente, "entreno gratis por hobby y el año pasado dimos muy buena imagen, pero este año cambió todo, no sé porqué. Nosotros queremos seguir entrenando, pero en estas condiciones no podemos. Si no se quiere ir que busque entrenadores, yo tengo dos hijos en el alevín y si me gusta el nuevo entrenador seguirán y si no los sacaré del club".

Por su parte, el presidente, Guillermo Fernández, no quiso hacer valoraciones al respecto por el momento y no aclaró si continuará o no al frente del club en las próximas horas.