Marino y Laredo llegaban a este encuentro igualados en todo y con unas necesidades idénticas para evitar caer en la parte más peligrosa de la tabla. El terreno de juego de Miramar aunque estuvo blando y resultó exigente en el plano físico, se encontraba algo mejor que quince días atrás con motivo de la visita del Palencia Cristo. Los azules entraron mejor al encuentro al inicio de ambos periodos, luego se entró en unas respectivas fases de igualdad, brega y errores y tras el 1-0, llegaron los mejores momentos del partido, con opciones para que los luanquinos cerrasen el marcador y también tuvo protagonismo Aramburu, salvando con el pie un remate de Diego Rozas que pudo suponer la igualada.

Victoria importante para los de Manel Menéndez que rompen una racha muy negativa que les había llevado a lograr un solo punto en los cuatro anteriores encuentros disputados.

Que el partido se jugase a una inusual hora de las 18:15, sirvió para que los gozoniegos supiesen, al descanso, los últimos marcadores finales que afectaban a sus rivales directos. La dinámica negativa y el cero a cero añadían una carga de pesimismo, pero, como reza en los tópicos, un resultado favorable lo cambia todo y así fue al término.

Borja Álvarez por doble amarilla y Ander Santamaría, por idéntico motivo, no pudieron estar en los respectivos onces. En los primeros minutos Óscar Fernández tuvo protagonismo, primero en un disparo que atajó David Puras y en el 7' en un centro que salvó Adrián Zorilla, antes de que llegase Iván Fernández al remate. En el 4' los visitantes pidieron una mano de Dailos que el colegiado no consideró y en el 36' Fagir remató de cabeza, la pelota rozó la pierna de Cárcaba y acabó en las manos del meta Puras.

Tras el descanso, volvió a intentarlo el Marino. En el 46' entre el meta visitante y el central haitiano Sebas Lauture se armaron un lío que a punto estuvo de costarles un disgusto, en el 52' Fagir reclamaba máxima pena tras caer en un forcejeo y la más clara llegó en el 58'. Matador botó un corner desde la izquierda, la pelota coló hasta el segundo palo y esto sorprendió a Dailos que no se la esperaba y remató fuera. Cuando tan sólo llevaba tres minutos en el campo, Luis Nuño lograba el gol que a la postre significó que los puntos se quedasen en Luanco. Centró Iván, cabeceó Fagir, dudó la defensa y Nuño empujó a la red, con el pie y desde dentro del área pequeña.

A partir de ahí llegaron los momentos más entretenidos y los de mayor riesgo ante ambas porterías. Sebas y San Millán pudieron empatar en el 73', Puras despejaba un remate de Dailos en el 74', Lora mandaba una falta por encima del larguero en el 83' y Aramburu salvaba un remate raso de Rozas en una grandísima intervención. Diego Rozas volvió a tener otra opción tras un despeje erróneo en el 89' y después de seis minutos de tiempo de prolongación, el Marino pudo celebrar esta necesaria victoria.

El Marino cerrará el año el próximo sábado, en el campo Nando Yosu, frente al Rayo Cantabria que cayó derrotado en la mañana de hoy ante el Vetusta (1-2). Este encuentro entre el filial del Racing de Santander y el Marino se jugará, el citado sábado, en el horario poco habitual de las 12:30 horas.

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