El encuentro matinal entre el Roces y el Vallobín puso de manifiesto la gran diferencia que hoy existe entre el equipo local y el conjunto de la barriada naranquina ovetense, si el primero está en una racha afortunada desde el inicio de temporada, donde juego, resultados y ausencia de lesionados de importancia viajan de la mano, en el segundo la fortuna les es esquiva en estas siete primeras jornadas del campeonato, donde juego y resultados no muy boyantes van parejos con la desgracia en forma de lesiones. Jugadores de gran importancia en el esquema de Abel Fernández como son Sinchi, Gelo, Nacho Victorio y Pipa Sánchez han contraído lesiones que les han apartado de la alineación y obligaron al entrenador ovetense a presentar un equipo en el que, a lo largo de los noventa minutos estuvieron sobre el terreno de juego hasta siete jugadores de menos de veinte años de edad.

Al final del encuentro, el poso y madurez de los jugadores locales, muchos de ellos con experiencia reciente en Tercera, se impuso a las ganas , no exentas de calidad pero si de experiencia en la categoría, que muestran jugadores muy jóvenes que se estrenan esta temporada en la categoría como Fonsi, Mario, Rodri, Galo, Martín...

A poco de iniciarse el partido una internada profunda de Rodri por la banda izquierda terminó en un buen pase al punto de penalti que fue desaprovechado por Robi, que raramente perdona en ocasiones como la que le sirvió Rodri.

El partido transcurría plácido, sin más ocasiones de gol reseñables, pero en el minuto 27, en una jugada de ataque del equipo local, el balón llegó al centro del área naranquina y, esta vez, Edu si aprovecho el servicio de su compañero para rematar certero al fondo de la portería defendida por Fonsi, inaugurando el marcador. Hasta que llegó el descanso de nuevo el encuentro volvió a sumirse en alternativos intentos de ambos equipos por adentrarse en el terreno del rival en busca de crear ocasiones de gol, pero de manera totalmente infructuosa, no pudiendo reseñarse jugada alguna con peligro de gol.

A poco de comenzar la segunda parte, tras un saque de banda que el árbitro concedió al Roces, cuando parecía corresponderle al Vallobín, el balón llego al interior del área del equipo ovetense y dejó en inmejorable posición para el remate a Rubio, que no perdió la ocasión conseguir una definición perfecta para marcar el segundo gol.

Los jugadores del Vallobín no se amilanaron y trataron de aminorar distancia en el marcador llegando a disponer de dos buenas ocasiones, la primera tras un saque de falta de Robi y la segunda, muy clara, cuando Javier se quedó sólo ante el meta local tras un gran servicio de Sergio, pero disparó fuera.

El equipo ovetense siguió en su intento de inaugurar su marcador hasta el último instante, y así en el minuto 94, la posición tan adelantada de la mayoría de sus jugadores propició que, tras un robo de balón en el medio del campo, dos jugadores del Roces avanzasen en terreno contrario con la sola oposición de Pedro Roza en su progresión hacia la portería defendida por Fonsi y, cuando Aitor se disponía a servir a su compañero el balón en inmejorable posición para anotar, Pedro Roza en su cruce por evitarlo acabó siendo el que anotó en su propia portería el tercer y último gol del partido.

En resumen, victoria justa del cuadro local, quizá demasiado holgada para los merecimientos de ambos equipos, que lleva al Roces a encaramarse en la primera posición de la tabla tras los resultados de esta última jornada.

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