La derrota del pasado sábado ante el Ibiza
(0-1) avivó el debate sobre el mejorable rendimiento del Oviedo, tanto en juego
como en resultados. Los azules suman ocho de los dieciocho puntos disputados
y navegan por la zona media-baja de la clasificación.
Van seis jornadas de liga y, por el momento, influyen más las sensaciones que
transmite el equipo que los resultados, pero lo cierto es que el Oviedo es uno
de los equipos menos goleadores, con tan sólo tres tantos a favor, algo que
consigue maquillar gracias a que el equipo se muestra sólido en defensa. Pero
se espera bastante más de esta plantilla, de la que todavía no ha podido
disponer Bolo en su totalidad, que sigue recuperando efectivos de la
enfermería como David Costas, que entra por primera vez en una convocatoria esta
temporada.
La preparación del partido ha sido
atípica, con un entrenamiento de miércoles a puerta cerrada en la que el Oviedo
disputó un partidillo con el Vetusta, y en la que Bolo probó un 4-3-3
como alternativa al habitual 4-4-2. También por el entrenamiento del día
posterior, que consistió íntegramente en un torneo de fútbol-tenis. Borja
Sánchez, con una lesión muscular que le mantendrá apartado de los terrenos de
juego tres-cuatro semanas, es la única baja segura para la cita. Sangalli
arrastró alguna molestia durante la semana y eso, unido a su bajo rendimiento en
los últimos partidos, podría abrir la puerta a que Bolo buscase una novedad para
el extremo diestro al que podrían entrar Viti -que vuelve tras superar una
lesión- o Miguel Llambrich. También se esperan cambios en la izquierda,
donde Pomares podría ocupar el lateral en detrimento de Aceves y Abel Bretones
-que la pasada jornada estuvo sancionado-, la vacante en el extremo zurdo, a la
que también aspira Marcelo Flores.
El once podría ser el formado por Tomeu
Nadal; Lucas Ahijado, Rodri Tarín, Dani Calvo, Pomares; Miguel Llambrich,
Montoro, Koba Leïn, Abel Bretones; Sergi Enrich y Borja Bastón. En el
banquillo estarían Quentin Braat (P.S.), David Costas, Luengo, Aceves, Luismi
Sánchez, Javi Mier, Viti Rozada, Sangalli, Marcelo, Jimmy, Hugo Rama y Samuel
Obeng.
La expedición partirá esta tarde, a las
cinco y media, del Nuevo Carlos Tartiere y pasará la noche en tierras lucenses.
El encargado de la contienda será el
madrileño Gálvez Rascón, a partir de las 16:15 horas, en el Anxo Carro, donde
habrá algo menos de medio millar de oviedistas después del plante de la APARO
para organizar desplazamiento por discrepancias con el club gallego.
El rival: C.D. Lugo
El Lugo, con muchos cambios en su
plantilla y miembros asturianos en su cuerpo técnico como Hernán Pérez y
Clemente Sánchez, lleva un punto menos que los carbayones en este arranque
liguero. Las dos últimas jornadas perdieron, en casa (1-2) ante el Alavés y
fuera (3-1) ante el Villarreal.
En su plantilla militan caras conocidas para el fútbol asturiano como los
exsportinguistas Óscar Whalley, Xavi Torres, Jordi Calavera o Álex Pérez, y el
exoviedista Josep Señé. Pero, sin duda, su hombre más incisivo en este inicio de
temporada ha sido el delantero Chris Ramos, autor de cuatro de sus siete goles,
que fue expulsado la pasada jornada en Villarreal y se perderá la cita ante el
Oviedo.
