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Ziganda: "Es una pena que haya estas
 rencillas y desencuentros"

Jueves 14 de abril de 2022
G. Bañó
Fotos: Fierros
Oviedo

El técnico lamentó que no se pueda desplazar la afición oviedista a El Molinón y espera un partido igualado, que no sea muy abierto, donde influya más lo mental que lo técnico o táctico.

Al Real Oviedo le resta tan sólo el entrenamiento de mañana viernes. Será una sesión especial que se celebrará en el Nuevo Carlos Tartiere, con las puertas abiertas, a partir de las 10:30 horas. Un entrenamiento que servirá para cargar pilas a la plantilla de cara al derbi del sábado (El Molinón - 20:30 horas), "imagino que será un chute de energía para todos. La gente tendrá gana de darnos un grito de ánimo y nosotros muy agradecidos, porque todo esto que se transmite es un contagio continuo y todo suma. Contentos por cambiar la dinámica de estos dos últimos años. Tenemos un objetivo ambicioso, muy bonito, el fútbol nos está dando la oportunidad de vivir algo grande".

El técnico compareció esta mañana en El Requexón, donde afirmó que toda la plantilla está "bien y con muchísimas ganas. Nadie ha venido a tratarse, a recuperar... nadie tiene un síntoma de no estar al 100%, ni quiere dar ninguna excusa para no estar el sábado". David Costas y Joni Montiel, que vieron la quinta amarilla ante el Leganés, serán las únicas bajas. El técnico no quiso dar pistas, aunque aseguró tener claros los sustitutos.

Ziganda reconoce que se nota que es una semana de derbi, "uno se contagia por el entorno y por mucho que se quiera abstraer es imposible que no le llegue todo lo que rodea al partido. Se nota y tenemos ganas de que llegue el partido y dar una alegría a la gente". El técnico no cree que haya euforia por la clasificación, aunque reconoce que "la manera de afrontarlo no es la de otros años en los que además del derbi mirábamos de reojo la clasificación, pero en nuestro caso tenemos claro cómo lo queremos vivir. No es un partido de liga, no es un partido de tres puntos, hay que vivirlo y sentirnos verdaderos afortunados por poder jugarlo y luego tener el orgullo de sacarlo adelante. La felicidad de cuando hemos ganado no tiene precio, son experiencias para toda la vida. La oportunidad del sábado en El Molinón, con todo el ambiente en nuestra contra, es un magnífico escenario para dar una alegría a los nuestros".

El del sábado será el quinto derbi para Ziganda, que lleva tres victorias y un empate, el cosechado en la primera vuelta en el Tartiere. "A ver si somos capaces de mantener esta racha, pero cada partido es diferente, por mucho que lo juguemos los mismos entrenadores, jugadores, mismas plantilllas... cada partido saldría diferente. He tenido suerte de poder vivirlos, nos llevamos un pequeño gran disgusto en la ida de este año, pero lo jugamos bien y tuvimos muchas opciones de ganarlo. El sábado iremos a por el partido porque sabemos lo que significa".

No quiso dar pistas con los sustitutos y tampoco con el sistema, "¿reforzar el centro del campo? es una posibilidad. Es una de las variantes, podemos jugar como en Cartagena, como en Burgos...".

Por parte de algunos sectores se ha mostrado preocupación por la designación de un árbitro canario como Trujillo Suárez, que estará respaldado por el gallego Pérez Pallas desde el VAR. Ziganda fue claro, "no me preocupa nada. Confío plenamente en los árbitros, alguien tiene que arbitrar. Creo que es un buen árbitro e intentará hacer las cosas lo mejor posible. Se va a encontrar un ambiente muy duro, bonito, muy fuerte... pero supongo que estará muy motivado y no tengo la mínima duda de que le gustará hacer las cosas lo mejor posible".

Del Sporting se espera un equipo "muy motivado y muy excitado. Empezaron muy bien el año, luego se les fue complicando con los resultados, cambio de entrenador... ahora tienen el derbi y estarán contagiados también por su público y el ambiente del partido. Imagino un rival que tendrá muchas ganas de dar una alegría a su afición, nada diferente a lo que podamos intentar hacer nosotros. Espero un partido igualado y que no sea muy abierto, pero tenemos que estar preparados para cualquier escenario". Con la salida de Gallego y la llegada de Martí "han cambiado la manera de afrontar los partidos, cada técnico tiene su estilo y su manera de ver el fútbol. Luego hay otras connotaciones, el aspecto anímico, mental, motivacional... influye tanto o más que el técnico o el táctico. El que es capaz de afrontar esos momentos sin dejarse llevar por la electricidad de un derbi y tener la cabeza fría o superarse en momentos de tanta tensión es quien se lleva el partido. Nosotros tenemos jugadores que ya sabemos cómo han afrontado los derbis y tenemos plena confianza en ellos".

"Puede ser un partido de alto riesgo, pero también recibo una rivalidad sana"

El Consejo de Administración manifestó que no acudirá a El Molinón, tras la decisión del Sporting de no enviar entradas a Oviedo. El técnico comentó que no sabe "cómo es todo", pero sí afirmó que "es una pena que haya estas rencillas y desencuentros que son un poco sin sentido. Puede ser un partido de alto riesgo, porque ha habido altercados hace unos años, pero también percibo que hay una rivalidad sana, familiar, de pueblos, en los colegios unos son del Oviedo otros del Sporting... y no hay nada más bonito que eso. Vivirlo con el orgullo de defender cada uno lo suyo y no poder vivirlo juntos con el colorido que da es una pena. Hoy leí en las noticias que 20.000 alemanes vienen a Barcelona a ver un partido de fútbol. Es un poco sin sentido. Hay que llevarlo de otra manera, sería un gran ejemplo". El navarro recordó que del derbi en el Tartiere le quedó una foto en la retina "cuando meten gol ellos sí veo gente que se levanta para celebrar el gol. Está bien que puedan celebrar el gol del empate en el Tartiere y se fueran contentos. Yo entiendo así un derbi. Cada uno defiende lo suyo y su forma de sentir".

No podrán disfrutar de un viaje masivo en El Molinón, pero Ziganda apuntó que "de la afición la pudimos disfrutar el domingo pasado sin ir más lejos. Fue un momento eléctrico, brutal. El partido contra el Leganés fue muy parecido al de la Real Sociedad 'B', la diferencia fue el entorno, la comunión que había, el espíritu que fuimos capaces de poner, la afición nos apoyó y lo sacamos adelante. Futbolísticamente fueron parecidos. La diferencia fue la intensidad que pusimos nosotros y la comunión. La afición lo único que hace es animar, empujar... es una pena que no puedan estar, pero van a venir mañana a animarnos y el domingo siguiente contra el Mirandés".

 

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