El Real Oviedo cayó en su visita al segundo clasificado. El
Deportivo de la Coruña venció 3-0 a los carbayones, aunque el partido estuvo más
igualado de lo que muestra el marcador. Los de Jaime Arias encajaron un gol
pronto, pero tuvieron opciones para empatar antes del descanso. En la segunda
mitad encajaron el segundo y tuvieron oportunidades para meterse en el partido,
pero el portero local fue uno de los mejores de su equipo y acabaron cediendo el
tercero en una contra.
Pero lo destacable de este partido no fue lo sucedido sobre
el terreno de juego. El Deportivo de la Coruña no permitió el acceso del público
al partido. Desde el club coruñés esgrimen que solo se acoge público en los
partidos disputados en el campo nº 1 que es el que tiene grada para
espectadores.
Este partido de División de Honor no se pudo jugar allí
debido a la coincidencia con el encuentro femenino de Reto Iberdrola entre el
Dépor y el Parquesol. El club esgrime que por este motivo se disputó el partido
en el campo de entrenamiento nº 3, en el que "no hay gradas y por tanto no puede
entrar público, por control de accesos".
Más de un centenar de espectadores siguieron el partido desde
la valla que limita la Ciudad Deportiva del Deportivo de la Coruña con la
carretera, algo es habitual cuando no pueden jugar en el campo nº 1, según el
club coruñés, "la gente no puede ponerse en el perímetro porque son campos de
entrenamiento y, sobre todo, por normativa autonómica Covid, ya que tiene que
haber asientos y trazabilidad de entradas". Estas explicaciones llegan tarde
para las decenas de seguidores del Oviedo, principalmente familiares de los
jugadores, que hicieron más de 500 kilómetros para seguir el partido tras una
valla. Desde el Real Oviedo aseguran que no recibieron notificación de que el
partido se jugaría a puerta cerrada.
Afortunadamente, el Arenal y el Covadonga, los dos equipos
asturianos que visitaron al Deportivo de la Coruña esta temporada, no tuvieron
problemas con el acceso del público.
Por otra parte, el Oviedo tuvo la lesión de Vicente Antuña.
Al centrocampista se le quedó clavada la rodilla y, a la espera de las pruebas,
podría tratarse de una lesión grave.
Este fin de semana no habrá liga de División de Honor y la
próxima cita del Oviedo será el sábado 5 de febrero ante el Covadonga en El
Requexón, a las cuatro de la tarde.