El Guillén Lafuerza - Real Juvencia de Primera
Regional tuvo que ser suspendido en los últimos minutos de partido, tras una
brutal agresión al árbitro, por parte de un jugador local. El encuentro se
disputó en el Díaz Vega, debido a las obras de Matalablima, y transcurría con
normalidad, con 0-1 en el marcador a favor de los trubiecos, que estaban jugando
con diez por una expulsión al cuarto de hora de la segunda mitad.
Las protestas de una falta a favor del Juvencia
fueron el detonante de la expulsión de dos jugadores del Guillén Lafuerza que ya
tenían amarilla. A continuación, G.I.A.V., jugador del Guillén, vino corriendo y golpeó
con fuerza con su brazo a la cabeza del colegiado, según relataron fuentes
presenciales. El árbitro de Nalón, Álvaro
González Bello, no se lo esperaba y cayó conmocionado al suelo, teniendo que ser
atendido por un juez de línea.
Corría el minuto 87 de partido y el árbitro
decretó el final con el 0-1. Posteriormente acudieron varias unidades de la
Policía, así como sanitarios para revisar las lesiones. El árbitro salió por su
pie del campo y fue trasladado en ambulancia a Urgencias del HUCA.
Desde el Guillén Lafuerza lamentan lo sucedido
y aseguran que este jugador "causa baja automáticamente en el club. Esto no se
puede permitir, es bochornoso", indicó Pablo Iglesias. El vicepresidente del
club quiso aprovechar la ocasión para pedir disculpas públicamente y afirmó que
"no queremos esta conducta en el Guillén. Estamos trabajando
por amor al arte y que hagan esto jode bastante".
El jugador que protagonizó la agresión fue
identificado por la Policía.