Susto en el campo de Santa Bárbara. En la
jornada de ayer se enfrentaron el Atlético de Lugones 'B' y el Ujo, de Tercera
juvenil, aunque el partido quedó suspendido en el minuto 35 de la primera parte.
El portero local, Eduardo Fernández, recibió un golpe leve por detrás de la
cabeza en una disputa de balón, que le dejó inconsciente.
Aunque el meta se hizo con la pelota,
rápidamente la tiró fuera y cayó sobre el terreno de juego, donde estuvo
inconsciente unos minutos, según cuentan fuentes presenciales. Su compañero y
capitán del equipo, Javi Presa, se percató de la situación y rápidamente le
metió los dedos en la boca -un acto muy arriesgado, ya que en esta situación se
puede producir un bruxismo que puede dejar atrapados los dedos en la boca- para
evitar que se tragase la lengua en el primer momento, aunque pronto saltó el
técnico local, Marcelino Cuesta, "lo pusimos en posición de seguridad -lo
correcto en este tipo de situaciones-, intentamos hablar con él pero no
respondía a ningún estímulo, aunque notábamos que respiraba. Luego empezó a
convulsionar y le tapamos con unas mantas hasta que llegó la ambulancia", que
tardó cerca de veinte minutos.
El personal sanitario le colocó un collarín y
lo subió a la UVI, donde consiguieron estabilizarlo antes de su traslado al HUCA.
Las noticias no pueden ser más positivas, Eduardo Fernández recibió el alta
médica esta mañana y ya mandó una nota de voz a sus compañeros avisando de que
esta semana no podrá entrenar, pero que para la que viene espera estar
ejercitándose con normalidad.
Su técnico, Marcelino Cuesta, respiró aliviado
cuando le comunicaron desde el HUCA que estaba bien y sin secuelas, "en el
momento yo quedé pálido y cuando llegó la ambulancia fue cuando me di cuenta de
lo que acababa de vivir". Desde el Lugones agradecieron el comportamiento del
Ujo, que puso todas las facilidades para que se suspendiera el partido, que se
reanudará el miércoles 8 de diciembre, posiblemente con Eduardo Fernández bajo
palos, que a sus 15 años juega habitualmente con el Juvenil 'B' a pesar de ser
cadete.