Lo mejor, el resultado. El Leganés dominó y tuvo las mejores ocasiones en un mal partido del Oviedo, que no estuvo acertado con balón y se mostró muy frágil defensivamente. Los pepineros gozaron de claras oportunidades para ganar, pero la falta de puntería y el acierto de Femenías evitaron que hubiera goles. El meta balear fue, sin duda, el mejor del Oviedo, que mostró una de sus peores versiones de la temporada.

Ziganda no pudo contar con los lesionados Javi Mier y Arribas, además de con el internacional Jirka. El técnico navarro dio la titularidad a Pierre Cornud y a Matheus, en detrimento de Mossa y Samuel Obeng, que comenzaron en el banquillo.

La primera mitad fue prácticamente un monólogo del Leganés. Los pepineros se mostraron más precisos con balón y más intensos que un Oviedo desnortado, sin claridad con balón y frágil defensivamente. Pronto le fue anulado un gol al conjunto local, tras un remate de José Arnaiz por fuera de juego, que le ganó la espalda a un espeso Lucas Ahijado.

El Oviedo tuvo un par de acercamientos. Matheus lo intentó con un disparo desde la frontal que se marchó desviado y, posteriormente, reclamó penalti tras un encontronazo con Sergio Palencia.

El último cuarto de hora fue de acoso y derribo del Leganés. José Arnáiz, Fede Vico y Borja Garcés generaron mucho peligro y trajeron loca a la zaga azul. El primero probó fortuna en el minuto 27, entrando desde la izquierda hacia la frontal, pero su remate lo sacó Femenías, que tocó lo justo para desviar la pelota al larguero. Seis minutos después fue Fede Vico quien tuvo una clara ocasión, pero su remate lo desvió a córner Jimmy, tirándose al suelo para tapar el tiro.

Femenías fue el mejor del Oviedo en la primera parte y en el primer minuto de la prolongación evitó el gol enviando a córner un potente disparo de Javi Hernández, dentro del área.

La segunda mitad comenzó con el mismo guion. El Leganés seguía dominando y en el 50' fue el exoviedista, Javi Hernández, quien obligó a esforzarse a Femenías para despejar su chut a córner.

Ziganda buscó soluciones y retiró a Viti y a Matheus para dar entrada a Sangalli y a Pombo. El lavianés apenas intervino y Matheus no estuvo mal en los pocos balones que recibió. Pombo entró en la punta de ataque, aunque poco después pasó a la banda izquierda, con la entrada de Obeng. Luismi entró por Brugman para dar refresco a la medular y evitar sorpresas con un jugador amonestado. De las botas del uruguayo nació una buena aproximación del Oviedo, en el 62'. Recibió en profundidad por la izquierda y centró al área, donde recogió al bola Borja Sánchez -que estuvo desaparecido-, pero su despeje impactó en un defensa. En la contra del Leganés, Lucas Ahijado vio su quinta amarilla de la temporada, por lo que no jugará el sábado ante el Amorebieta.

El Oviedo consiguió sacudirse un poco de la presión con la entrada de Pombo, que generó peligro cada vez que tocó la pelota e hizo tener más precauciones al Leganés, al que no le sirvió el dominio, ni las ocasiones.

Siguió intentándolo hasta el final el Leganés, al que la falta de puntería le privó de los tres puntos. Arnáiz remató desviado una dejada de Fede Vico y éste, poco después, cabeceó flojo un centro desde la izquierda.

Carlos Isaac entró en los minutos finales para apuntalar la banda derecha, en detrimento de un Borja Bastón que pasó desapercibido en el regreso a la que fue su casa. Pombo volvió al centro y Sangalli pasó a la banda izquierda.

La última del Leganés fue un cabezazo de Bruno, en un córner botado por Naim, que despejó Femenías nuevamente a córner, en el minuto 89. El Oviedo nunca renunció al ataque, a pesar de sus numerosas imprecisiones y acabó el partido botando dos córners. Uno de ellos dio pie a un testarazo de David Costas que salió desviado por poco.

El empate mantiene al Oviedo en la zona media de la clasificación. Los azules volverán a jugar el sábado, a las 16:00 horas, ante otro rival de la zona baja como el Amorebieta.