Con el paso de los minutos el conjunto de Andrés Hernández fue tomándole el ritmo al encuentro. El plan de partido era claro en enviar balones a Nelson y Rabii para que éstos, que se desfondaron por completo los noventa minutos, inventasen y creasen peligro. Rabii la tuvo primero con un disparo que ataja Sergio y Nelson después en un remate cruzado tras una pérdida en campo propio de Damián, pero que cruza en exceso.

Al minuto 26 se le anularía un gol Langreo ‘B’ al señalar el asistente fuera de juego de Rabii a un rechace de Sergio tras disparo previo de Nelson. Muy protestada la acción, pero el tanto no subió al marcador. Fue el preludio de la mejor ocasión caudalista de la primera parte que volvería a ser para Míchel Secades. El mediocentro empaló fuerte abajo y colocado al poste un pase atrás de Kang, pero Manfred sacó una mano abajo de enorme mérito para evitar el gol.

No se movió el marcador en esa primera parte muy abierta y tampoco lo haría en la segunda, si bien ésta fue muy diferente. Porque tras el paso por vestuarios, Nacho Cabo cambió su equipo, que pasó a formar con defensa de tres y se hizo claro dominador, sometiendo al Langreo ‘B’ que buscaba transiciones y contras, pero con poco éxito. En todo el segundo acto solo un disparo flojo de Nelson a manos de Gorka, que sustituyó a un lesionado Sergio al descanso, llevó cierto peligro ante la meta caudalista.

Porque las ocasiones claras estuvieron en la otra portería. La primera la tuvo Cris Rubio a los tres minutos cuando solo en el área y ante Manfred no acierta a batirle en el mano a mano. Fue la más clara hasta llegar ya al tramo final. Porque, aunque el Caudal dominó le costó mucho crear peligro ante un ordenado filial donde sobresalieron en la segunda parte sus dos centrales, auténticos muros que el Caudal no pudo quebrar. Sin embargo, en el tramo final los mierenses se volcaron y quizá producto del cansancio si lograron crear mucho más peligro.

Omar Hernández protagonizó dos buenas ocasiones. La primera al rematar alto un centro de Damián que Manfred, en su único error del partido, midió mal y se ‘comió’, pero el gijonés no pudo rematar entre palos sin portero. La segunda, poco después, un pase atrás de Borja Navarro que Omar chutó ajustando al palo y que Manfred detuvo en dos tiempos.

Lo intentaron hasta el último minuto y en el descuento aún hubo dos ocasiones más para los mierenses. Primero Robert chuta alto y en la última del partido, una falta colgada desde el centro del campo, queda el balón suelto en el área, pero nadie llega a empujar antes de que Manfred, que pareció dudar en la salida, se hiciese con el balón y Álvarez Rodríguez decretase el final de un partido que volvió a provocar silbidos y críticas de una parte de la afición local al técnico, Nacho Cabo, en el Hermanos Antuña.

La próxima jornada el Caudal acudirá a Tuilla para visitar El Candín el domingo 7 a las 16:00 horas. Por su parte el filial del Unión recibirá al Praviano ese domingo, pero a mediodía, al CD Praviano.

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