El presidente Luis Gallego González y el tesorero
Juan Carlos Marcos de la Parte presidieron la
Asamblea General Ordinaria del Club Marino. Como
suele ocurrir lo más significativo en esta reunión
anual fue lo referido a la parte económica, si bien
Gallego tocó otros temas como la convocatoria de
elecciones, tras cumplirse cuatro años de mandato,
el controvertido tema de los vestuarios de Miramar y
el recorte de las subvenciones.
En breve habrá convocatoria a elecciones a
presidente del Club Marino, como obliga la
legislación cada cuatro años y la idea de Luis
Gallego es la de presentarse a la reelección.
Luis Gallego habló de los vestuarios de Miramar, de
su estado precario y de buscar soluciones totales o
parciales. Habló también de las subvenciones
municipales que en otro tiempo fueron de 66.000
euros y que actualmente son de 25.000. Indicó que
esta campaña pasada concluyó con un superávit de
17.000 euros, si bien el club partió con más de
60.000 euros en caja, con lo cual, pese a ese
superávit, la temporada arrojó déficit.
Luis Gallego cifró en 487.000 euros el presupuesto
para la actual campaña, 2021/22 y aseguró que piensa
cumplir rigurosamente todos los compromisos, pero
vaticinó que para la 2022/23 habrá una bajada
general de ingresos. "De momento podremos mantener
las nóminas, pero posiblemente dentro de un año
precisemos ajustar todo y reducirlas en un veinte
por ciento o más", indicó el presidente.
