Impactantes fueron los
momentos y las imágenes
que siguieron al
violento contacto de la
rodilla del lateral del
Depor, Salva Ruíz con la
mandíbula de Emilio
Morilla. Un choque
involuntario que creo
muchísima preocupación
en el club luanquín. El
defensa era trasladado
al Área de Máxilofacial
del Huca y en la mañana
de hoy fue intervenido
de esa fractura de
mandíbula. Los cirujanos
valoraron con
satisfacción los
resultados de esta
operación, consistente
en la colocación de dos
placas de titanio para
fijar la fractura. Según
consta en el comunicado
del Club Marino, Emilio
Morilla tendrá que
permanecer dos o tres
días ingresado, antes de
regresar a su domicilio.
Las bajas se le acumulan
a Manel Menéndez en el
tramo final ya que para
César Suárez, Guille
Pinín y ahora Emilio
Morilla la temporada ha
concluido. Solo restan
dos partidos que se
jugarán frente al
Compostela en el Campo
Verónica Boquete y ante
al Racing de Ferrol en
el que será el cierre de
esta segunda y última
fase. Para el encuentro
de San Lázaro volverá
Nacho Matador que
cumplió su partido de
sanción. Mendi ya estuvo
en el banquillo frente
al Depor aunque no
participó, por
precaución ante su
rápida recuperación de
una lesión muscular.
Ante el Deportivo de La Coruña,
el Marino realizó un partido práctico e inteligente
en el que debutó en liga el juvenil Miguel Prendes.
Curiosamente, Prendes y Guille Avendaño habían
jugado veinticuatro horas antes frente al Arenal B
de Primera juvenil y ambos fueron los autores de los
tantos que supusieron la victoria del equipo
luanquín. Prendes debutó en liga aunque había jugado
en partidos de pretemporada con el Marino y Guille
Avendaño, junto con Adolfo, debutaron en partido
oficial con el Marino, en la pasada Copa Federación
frente al Gijón Industrial.
El partido Compostela – Marino se jugará el próximo
domingo en el estadio San Lázaro – Verónica Boquete
a partir de las 17 horas y el capitán Guaya se
perderá la cita al haber visto ayer cartulina
amarilla y cumplir ciclo.
