El
Mosconia no atraviesa
una buena racha, lleva
dos derrotas seguidas y
nueve partidos sin ganar
en los que ha conseguido
cuatro puntos. Pero por
encima de esta dinámica
negativa, que sitúa a
los de Grado en novena
posición, sorprende su
bagaje goleador.
El conjunto moscón ha
anotado trece goles en
los dieciocho partidos
disputados, pero lleva
más de la mitad de la
competición sin marcar.
Exactamente son nueve
partidos los que llevan
sin anotar un gol. El
último fue el 27 de
diciembre de 2020, en el
partido aplazado ante el
Llanera que acabó con
victoria local por 4-0.
El triunfo más abultado
del equipo esta
temporada, en la que
parecieron agotar su
saldo goleador. Tolu,
que ese partido firmó un
doblete, fue el anotador
del cuarto y último gol
del Mosconia en el
minuto 66 de partido.
Este fue el antepenúltimo partido
de Manel como entrenador del Mosconia, ya que el
lunes 11 de enero
se confirmó su fichaje por el Marino de Luanco.
Su
sustituto en el banquillo del Marqués de la Vega
de Anzo fue el sevillano Pepe Masegosa.
Desde la llegada del nuevo técnico el Mosconia ha
empatado tres partidos y perdido cuatro. Un dato
curioso es que, por el momento, no ha podido
celebrar ningún gol en su estreno como entrenador en
la Tercera División asturiana.
A pesar de estos guarismos no es
el Mosconia el equipo con peores números goleadores.
Tienen un cociente de 0,72 goles/partido, al igual
que el Vallobín, y que empeoran cuatro equipos:
Avilés Stadium (10/18), Colunga (6/15) y Valdesoto
(9/15) y el Urraca (8/15). Precisamente, los de
Posada de Llanes estuvieron 695 minutos sin marcar
esta temporada, una racha que se prolongó durante
siete partidos consecutivos.
El máximo goleador del equipo es
Wilmer, con tres goles. Curiosamente anotó todos
ellos en la primera jornada de liga ante el Lenense,
partido que acabó con triunfo moscón por 3-0.
El Mosconia tendrá este sábado
una nueva oportunidad para romper esta dinámica
negativa que asciende a 834 minutos sin marcar.
Visitarán el Pepe Quimarán, a las cinco de la tarde,
donde jugarán su penúltimo partido de la Primera
Fase ante el Llanera, cuarto clasificado. En el Pepe
Quimarán se medirán dos equipos obligados a ganar,
los llanerenses para seguir con opciones de alcanzar
la tercera plaza y los moscones para intentar salir
de los puestos que dan lugar a la segunda fase por
la permanencia.