Los avilesinos aseguran su presencia en la fase de ascenso entre los tres primeros, con un resultado abultado ante un Praviano que se hundió en el tramo final.

Buen ambiente en el Suárez Puerta, de nuevo con público, ansioso por ver a su equipo construir el camino hacia la segunda fase en la mejor situación posible. Los blanquiazules dieron el primer paso en un partido con distintas fases, de claro color local al principio y al final pero con una fase intermedia en la que el Praviano vendió cara su piel, hasta que una mezcla de candidez defensiva e infortunio terminó con sus opciones.

Comenzó a tope el Avilés, que avisó en dos ocasiones antes del minuto 5, con un intento con la diestra de Joao y un remate de Albuquerque que golpeó el lateral del poste a la salida de un córner. Acto seguido llegó el penalti que adelantó a los locales, Natalio recibía al espacio un buen balón de Pato y era trabado por Agus Caserta. El capitán blanquiazul transformaba la pena máxima, añadiendo la muesca número 15 en su revólver.

El Avilés siguió insistiendo con la intención de ampliar su cuenta pero poco a poco el partido se fue igualando. El Praviano dio señales de vida con dos cabezazos de Iván Conceiçao y un disparo alto de Nouri, que sería protagonista superada la media hora, anotando el gol del empate con un saque de esquina directo que superó por alto a Davo y se coló por el segundo palo.