Pascual Puente convirtió
dos libres directos que
significaron tres puntos
para L'Entregu. El
Titánico plantó cara al
líder del subgrupo y
mereció puntuar.
1.- Real Titánico:
Diego Álvarez; Leyder
(Dani García m. 89),
Isaac, Milu, Hugo
Sánchez; Matheus Serrano
(Prida m. 81), Jorge
Barbón, Garri; Jairo
Santos (Víctor Robles m.
81), Pibe (Rubén RIesco
m. 74) y Manu Casariego.
2.- L'Entregu C.F.:
Alberto Benito; Álex
García, Traoré, Nuño,
Santi Otero; Noé
Fernández (Ricky Vaca m.
59), Pascual Puente;
Imanol Vergara (Javi
Revuelta m. 68), Yosu
Camporro, Steven Ospina;
Vally Cisse (Javi
Gutiérrez m. 55).
Árbitro:
Álvarez Ordóñez,
asistido por Buergo
González y Almeida
Valles. Delegación de
Gijón. Amonestó a los
locales Garri, Barbón,
Isaac y al técnico
Adrián González.
Goles:
0-1 m. 2 Pascual Puente;
1-1 m. 53 Isaac
Martínez; 1-2 m. 88
Pascual Puente.
Incidencias:
Las Tolvas. Terreno de
juego en aceptable
estado. Mañana soleada.
En torno a un centenar
de espectadores.
En muchas ocasiones el resultado en el fútbol no
hace justicia a lo visto en el terreno de juego. Hoy
puede tener esta sensación el Titánico, tras perder
por 1-2 frente a L´Entregu, que si bien supo nadar y
guardar la ropa, sufrió de lo lindo para llevarse
los tres puntos ante un Real Titánico que fue, en
líneas generales, mejor.
No pudo empezar mejor el partido para el líder del
subgrupo B. En la primera acción, tras una falta
discutida por los locales, Pascual alojó el balón en
la meta local, con un perfecto lanzamiento ajustado
al poste, al que no pudo llegar Diego.
No bajó los brazos el conjunto de Adrián González y
empezó a sumar ataques y buenas acciones que poco a
poco fueron inclinando la balanza a su favor.
Primero, un córner sacado por Santos, que hoy estuvo
presente en todas las acciones ofensivas de los
rojiblancos, lo finalizó Matheus arriba por poco.
Seguidamente, fue Pibe quien, tras una buena
combinación en banda izquierda, envió un balón
pasado a la frontal, a la altura del segundo palo,
que empalmó Leyder con potencia y obligó a Alberto a
lucirse para despejar. Respondió L´Entregu con una
falta lateral sacada con intención por Camporro ante
la que Diego respondió con la intervención del día.
Tras ese chispazo visitante, el conjunto lavianés
comenzó a adueñarse aún más del encuentro, ganando
todas las segundas jugadas y empezando a crear
peligro por banda izquierda, con Hugo desbocado
finalizando varias acciones que pusieron el ¡uy! en
la grada en al menos dos ocasiones. En definitiva,
los locales apretaban sin premio y los visitantes se
sentían cómodos defendiendo el 0-1, resultado con el
que se llegó al descanso.
En la segunda mitad se mantuvo la misma tónica:
impetuoso el Real Titánico en busca del empate y
precaución de los entreguinos sin arriesgar y
juntando bien las líneas. Ya a los cinco minutos de
la reanudación avisó Santos de la que se avecinaba
con un centro chut que se envenenó y, tras entrar
Manu al remate sin contactar con la bola y ya
superado el meta Alberto, la pelota se fue cruzada
por muy poco. Pero el empate parecía estar al llegar
y, cómo no, llegó. En uno de tantos balones
colgados, la indecisión del portero y defensa
visitante acabó con la bola a los pies de Isaac que
no desaprovechó la ocasión para fusilar a placer
desde cerca. Entonces el Real Titánico, lejos de
conformarse, aprovechó la inercia para crear más
oportunidades, generalmente con balones colgados o
saques de banda prolongados por Barbón, que fue una
auténtica pesadilla para el rival en este tipo de
acciones. Y fue el propio capitán lavianés quien
tuvo la más clara para culminar la remontada, pero
se topó con una brillante intervención de Alberto
tras cabecear un fabuloso centro de Leyder que tenía
perfume de gol. En la siguiente acción, aficionados
y jugadores locales reclamaron vehementemente una
pena máxima sobre Jairo Santos, que se fue al suelo
trabado por un defensor cuando estaba en una
posición inmejorable para, al menos, acabar con
peligro la jugada. Tras la negativa arbitral, llegó
otra buena acción de Santos que puso una pelota
larga al segundo palo para Manu que, de nuevo ante
las dudas en la salida del meta visitante, a punto
estuvo de conectar el remate.
Tras el arreón del Real Titánico llegó la esperada
calma tras los cambios y el partido se peleó más en
el centro del campo, sin ocasiones pero con mucha
intensidad. Y así, cuando los de Adrián González
parecían bajar el pistón y el L´Entregu firmar el
empate, llegó el desequilibrio final. En una falta
lateral lanzada de nuevo con maestría por Pascual,
la pelota se envenenó y superó a Diego por arriba,
colándose por la escuadra contraria al lugar del
lanzamiento. Así, con tan sólo dos minutos de tiempo
reglamentario más el descuento, los visitantes
supieron dormir el partido y que nada más pasara,
asegurándose tres puntos de oro en un partido en el
que se puede decir que contaron con la denominada
“suerte del campeón”.
