El Titánico comenzó mejor
plantado y se adaptó mejor a la situación del
terreno de juego que el propio San Martín. Aún así,
Ballesteros dispuso de un mano a mano que desbarató
Roberto y en el córner posterior, Bamba, libre de
marca, envió un rechace fuera.
Lo que fallaron los locales no lo
perdonó el Titánico, y en otro rechace tras un saque
de esquina, Isaac, ex del San Martín, aprovechó para
anotar el 0-1. Este gol dejó noqueado a los locales,
que vieron como un mal despeje de Alejandro le caía
a Manu Casariego para anotar el 0-2 con una
semivolea.
El paso por vestuarios cambió el
partido por completo. Los tres cambios realizados
por el técnico local dieron un vuelco al encuentro,
especialmente por la entrada de Dorian Hanza, que
creó muchos problemas con su velocidad y dio
mordiente ofensiva a su equipo. De sus botas salió
la primera ocasión de la reanudación, tras una
cabalgada por la derecha que terminó un centro al
área para Abdou, pero Roberto despejó a córner.
Pese al 0-2, el San Martín
confiaba en sus posibilidades y el gol de Berto
Fernández llegó tras un centro de Mati que remató
Dorian y rechazó Roberto, cayéndole el balón al
centrocampista para anotar el 1-2. Ese tanto espoleó
a los sotrondinos y Jordan empató el partido tras
una falta lateral.
Los lavianeses acusaron la falta
de rodaje -este es su tercer partido de liga- y una
falta botada por Alonso la remató Dorian, tras un
fallo de Roberto, para anotar el 3-2 definitivo. Un
gol muy celebrado por la plantilla y directivos
locales.
No hubo tiempo para que el
Titánico intentase la igualada y el San Martín logró
su quinto triunfo consecutivo. Los de Chiqui de Paz
visitarán el martes al Llanes y el Titánico repite a
domicilio un nuevo derbi ante L'Entregu.
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