Con la previsión de mejora de la situación epidemiológica se
espera que próximamente se flexibilicen las medidas
por parte del Gobierno del Principado de Asturias, a
nivel general.
El
pasado 24 de octubre,
la RFFPA decidió paralizar el fútbol asturiano,
de Tercera hacia abajo, ante las restricciones de
movilidad y de acceso a las instalaciones
deportivas.
Las competiciones nacionales se retomaron la segunda
semana de noviembre y siguieron su curso a puerta
cerrada, algo insostenible para el resto del fútbol
regional, que está suspendido por el Principado,
tanto los entrenamientos como las competiciones.
La RFFPA solicitó, hace algo más de una semana,
reunirse con el presidente Adrián Barbón y poder
exponer la vuelta de los espectadores a las
instalaciones deportivas, siguiendo las medidas del
Protocolo y en función de la situación
epidemiológica. Pero por el momento no han recibido
respuesta desde Presidencia. Varios clubes han
citado a Adrián Barbón en redes sociales para que
vuelva el público y la actividad del fútbol
territorial.
Maximino Martínez aseguró hace unos días
públicamente que no habrá fútbol regional hasta que el Principado
autorice la entrada de público, ya que se hace
insostenible para los equipos regionales jugar de
esta manera. Situación parecida a la del fútbol
base, que está suspendido por decreto del gobierno
autonómico para menores de 16 años.
En las próximas horas se esperan nuevas medidas de
flexibilización general en el BOPA, pero, hasta la
semana que viene no se esperan novedades en lo
tocante al fútbol. Desde la RFFPA quieren solicitar
que se puedan reanudar los entrenamientos a mediados
del presente mes y retomar las competiciones
territoriales en enero.