El Real Avilés alcanza el liderato, compartido con el Caudal, tras vencer al Vallobín por la mínima, con un solitario gol del brasileño Rafa Silveira en un partido donde los dos técnicos presentaron rotaciones respecto al partido jugado entre semana.

Abel Fernández tenía las ausencias obligadas por lesión de Tito y Trelles, así como la de Collar por abandono de la competición por motivos laborales. Hubo cuatro novedades respecto a la última alineación, Pablo Clemente, Kayce, Abel Piñon y Daniel Suárez, fueron de la partida por primera vez esta la temporada. Quizá el apretado calendario de esta atípica temporada coronavírica está detrás de esta rotación de jugadores dispuesta por el míster local. Más cambios todavía hizo Abraham Albarrán, que dio entrada a jugadores que no salieron de inicio el miércoles como Edu Cruz, Mathe, Guille Vázquez, Rafa Silveira, Andrés Cabranes y Chechu Fernández.

El partido se caracterizó por una intensa disputa del balón que generó mucha imprecisión en los pases y poco juego elaborado . El equipo avilesino se mostró más dominador del juego en la primera mitad, si bien generó muy pocas ocasiones de peligro en el área local, pero le bastó una, la mejor elaborada, con una veloz internada por banda derecha que culminó en un medido centro al área naranquina que Rafa Silveira cabeceó certeramente a la red. Sólo en otra ocasión un remate cruzado hizo intervenir al seguro meta local Marcos. El Vallobín por su parte, si bien estuvo acertado en la faceta defensiva, no fue capaz de generar ocasión alguna con marchamo de gol.

A los 35 minutos de esta primera parte se produjo una jugada que pudo haber tenido influencia en el devenir del choque, el jugador avilesino Guiller Vázquez, que había sido amonestado en el minuto 30, fue sancionado con falta por practicar una peligrosa entrada en el centro del campo y, cuando todo parecía indicar que le sería mostrada la segunda tarjeta amarilla, con lo que dejaría a su equipo en inferioridad numérica, el colegiado de la contienda se olvidó de aplicar con el debido rigor el reglamento disciplinario, cuando en una falta de similares características producida minutos antes había mostrado la tarjeta amarilla al jugador local Daniel Suárez. La falta de decisión arbitral produjo un claro enfado en los jugadores locales.

Tras el descanso, la entrada en el campo de Nacho Cabal logró animar el juego atacante del equipo local con peligrosas incursiones por la banda izquierda , precisamente en una de ellas, en el minuto 70, Nacho hizo una perfecta asistencia a Manolo Gayol, recién entrado al terreno de juego, que disparó demasiado alto en buena posición. Diez minutos más tarde una clara ocasión de gol de Manolo Gayol fue invalidada al señalar el asistente arbitral fuera de juego en una jugada de esas que obligan a intervenir al VAR en las categorías superiores de nuestro fútbol.

En este segundo tiempo el Avilés ya no estuvo dominador, como en la primera parte, y no llegó a realizar jugada alguna de peligro en el área local. El partido fue tan competido como poco vistoso y sólo una jugada aislada, eso sí de muy buena factura, desequilibró una contienda que, por los méritos desplegados por ambos contendientes, parecía abocada al empate.

Dentro del buen tono general, en lo que a despliegue físico y fuerza en la disputa mostraron la mayoría de los jugadores, merecen ser destacados Pablo Clemente por el Vallobín y Mathe por el Real Avilés.

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