No hizo un buen partido el Sporting, quizá el peor de los seis, pero aun así consiguió sumar un punto que verá aumentado su valor con el paso de la jornadas. Reconoció David Gallego que el Tenerife fue mejor, pero que el oficio y la solidaridad de los suyos tuvo como recompensa un empate, que los coloca segundos igualados con el líder. No está nada mal.

Porque hoy, además de la enjundia del rival, el Sporting no pudo contar con dos de los tres centrales de la primera plantilla. Ni Babin ni Marc Valiente estuvieron a disposición del técnico, que tiró del canterano Pelayo para cerrar la línea de retaguardia. La otra gran novedad en el planteamiento fue la titularidad de Nacho Méndez en detrimento de Aitor García. Reflexionó Gallego en sala de prensa que buscaba hacer daño al Tenerife con el balón, juntando a tres futbolistas con buen toque como Manu, Pedro además del luanquín. La verdad que no lo consiguió.

Poco sucedió en la primera mitad. El Tenerife tenía más el balón, pero ambos se guardaban mucho respeto y casi no generaron ocasiones de peligro. La más clara de los locales fue aprovechando un regalo rival, ya que Cumic cortó un pase y desde la frontal chutó ajustado al palo. Los visitantes tuvieron más control pero sin inquietar a Mariño. El guardameta tuvo que intervenir únicamente con un chut de Vada que atrapó en dos tiempos.

No cambio mucho la película en el segundo tiempo, sin ocasiones y con una mayor posesión del Tenerife. Pero este Sporting ha demostrado en el inicio de la competición, que sabe sobrevivir perfectamente en choques donde el rival intenta buscarle las cosquillas, porque casi nunca lo consigue.

Y tener además la paciencia para esperar su momento. Y así en el 65 se adelantó en el marcador. En la única combinación de mérito del triángulo de canteranos, hoy juntos por primera vez en el once, llegó el 1-0. Manu García abrió a la derecha para Nacho Méndez, que cedió en el área para la llegada desde segunda línea de Pedro Díaz, que de disparo cruzado batió a Ortolá. El centrocampista había avisado previamente con un buen disparo de falta.

A partir de ahí, el Sporting cómodo y por delante en el marcador, se fue echando para atrás, no pudiendo estirarse y el Tenerife acabó inclinando por completo el campo hacia la portería de Mariño. Y parecía que le iba a salir bien nuevamente al equipo gijonés, pero hoy no fue así. Zarfino remató de manera acrobática el enésimo balón enviado al área, para batir de media vaselina a Mariño. Por lo visto en el juego, el gol hacia justicia. Y pudo ser peor, ya que en el 92 Sipcic cabeceó solo en la frontal del área pequeña, apareciendo milagrosamente el meta gallego para enviar a córner.

Al final reparto de puntos que deja al Sporting la sensación de haber ganado 1, a pesar de que cerca estuvo de conseguir la victoria. No estuvo bien con balón el equipo local, como bien reconoció David Gallego, pero aun así fue capaz de sumar. Los rojiblancos son segundos en la tabla con 13 puntos, los mismos que el líder Espanyol. La próxima cita será el jueves a las 21:30h en La Rosaleda ante el Málaga.