Ya hay protocolo para el regreso del
fútbol no profesional a nivel estatal, es decir, la
Segunda B, la División de Honor juvenil y las categorías
nacionales del fútbol femenino. Este protocolo es fruto
del acuerdo entre el CSD, las Comunidades Autónomas, la
Federación Española de Municipios y Provincias, la
representación de las Federaciones Deportivas Españolas,
el Comité Paralímpico Español, el COE y otros
interlocutores del deporte, tras la iniciativa del
Ministerio de Cultura y Deportes y del Comité Olímpico
Español.
Al igual que en el protocolo territorial, hace hincapié en
los principios de autorresponsabilidad y voluntariedad.
Cada club deberá designar un Delegado de Cumplimiento del
Protocolo, que se responsabilizará de asegurar que se cumplan todo los
requisitos de las condiciones preventivas del protocolo. Además, cada
instalación deberá tener un Responsable de Higiene, que posea
conocimientos específicos y prácticos sobre la instalación deportiva y su
funcionamiento, cuya responsabilidad será revisar los principios operativos del
Protocolo con las autoridades locales y asegurarse de que se apliquen
correctamente en la instalación todos los principios, recomendaciones y medidas
de higiene establecidas.
Para el control estrictamente sanitario se crea la figura de
Jefe Médico de cada Federación Deportiva Española, que se coordinará con
los responsables sanitarios de los clubes o las competiciones. Será necesario
elaborar un control de incidencias sanitarias a todos los niveles y reportarlo a
las autoridades competentes.
Las recomendaciones son las habituales: Uso de soluciones
hidroalcohólicas, distanciamiento social, uso de mascarilla, evitar saludos y
muestras de afecto... En caso de producirse un positivo se deberá comunicar a
las autoridades sanitarias, desinfectar las instalaciones y realizar rastreo
sobre posibles contagios.
El CSD recomienda -no es obligatorio- que en todas las
competiciones, al iniciar los entrenamientos de pretemporada o en su defecto 72
horas antes del inicio de las competiciones, se realice una prueba específica
COVID-19, para conocer la situación de los deportistas y técnicos.
Respecto al acceso de público, el CSD recomienda que el
máximo de público asistente sea de 500 personas en instalaciones cubiertas y de
1.000 personas al aire libre, aunque delega la responsabilidad a las Comunidades
Autónomas.
La RFEF ha designado un técnico para informar a los clubes
sobre dudas referentes al protocolo.
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