El club azul quiere
mantenerse 'cerca' de los aficionados, a la vista de que, de reanudarse la
competición los partidos serían a puerta cerrada.
Imagen del Real Oviedo 2-1 Real Sporting de
la temporada 2017-18
La cuenta atrás ha comenzado
y se espera que, en cuestión de un par de
semanas, puedan regresar los equipos a los
entrenamientos en sus instalaciones deportivas.
Sería una mini pretemporada dividida en tres
fases, con entrenamientos individuales,
grupales y de toda la plantilla en su última
fase.
El regreso de la
competición se espera, para mediados de junio,
aunque por el momento no hay fechas concretas,
ni comunicación oficial, a la espera de que
continúe la desescalada a nivel estatal. Lo que
está claro es que se producirá cuando lo decidan
las autoridades sanitarias.
Lo que parece poco probable es que los
aficionados puedan entrar al estadio para
presenciar el partido. El Real Oviedo
mantiene su postura inicial que proponía de
suspender los partidos hasta que hubiera
garantías sanitarias para los jugadores y
pudieran entrar los aficionados, aunque
tendrá que acatar finalmente el protocolo de
LaLiga y las autoridades sanitarias.
El Oviedo trabaja en varias ideas para no
distanciarse de sus aficionados, que están a
la espera de ver cómo evoluciona la pandemia y
del visto bueno de las autoridades competentes.
Una de ellas sería realizar una especie de
autocine en el parking del Carlos Tartiere,
que consistiría en una pantalla gigante para ver
los partidos y que los aficionados -desde sus
coches- estuviesen lo más cerca posible del
equipo. Otras opciones que baraja el club es
realizar una camiseta con el nombre de todos los
abonados, como se hizo en la temporada 2004-05,
o intentar un acuerdo con plataformas
televisivas para que los abonados puedan ver los
partidos del Oviedo que restan esta temporada.