La iniciativa del Mosconia tuvo buena acogida y el pueblo de Grado engalanó sus balcones.

Mónica Fernández, presidenta del Mosconia, y su familia.

El concejo de Grado es el segundo más castigado en esta crisis sanitaria del coronavirus, solamente superado por Pravia que tiene una tasa de 801,2 infectados por 100.000 habitantes. Grado cuenta con una tasa de 787 que supone también algo menos del 0,8% de positivos en su población que se ha sometido a los tests.

Gorka fue el primer jugador asturiano, y uno de los pocos, que ha dado positivo en coronavirus. El jugador del Mosconia 'B' sufrió el contagio en el Instituto Masaveu de Oviedo, que fue el foco que extendió el virus por el concejo, haciendo mucho daño a su residencia de mayores. El jugador del filial moscón se recuperó rápido y sin demasiados problemas, y no se registraron más casos en el club. "Estamos viviendo esta situación con mucha unión y dolor", afirma Mónica Fernández, que empatiza con los trabajadores y residentes, "todo el mundo conoce a alguien que trabaja o que está allí. Es una situación difícil, porque las familias no se pueden despedir, pero gracias a Dios está todo controlado ya".

Este fin de semana se celebró la I Flor de Grado, pero las restricciones impidieron celebrarlo según estaba previsto. Para poder hacerlo de alguna manera, a Mónica Fernández se le ocurrió hacerlo desde las ventanas y balcones de los edificios, "pensé en hacer algo para que los niños y la gente que estamos en casa pudiéramos celebrarlo y se me ocurrió esto". La presidenta del Mosconia anima el 'aplauso de las ocho' con música y comentó esta iniciativa al vecindario, "hablé con ellos y luego se lo dije a 'Pitus' -ex presidente del Mosconia- que ahora es el presidente de la Hermandad de Santiago y Santana, y nos pusimos manos a la obra".

Mónica Fernández salió ayer por primera vez en todo el período de confinamiento, "porque habitualmente es mi marido el que hace la compra de la que viene de trabajar. Había muchas banderas de Asturias, flores... La gente se esforzó muchísimo y Grao estaba guapísimo".

El Mosconia celebra este mes su 75º aniversario, pero sus actos quedarán pospuestos temporalmente, así como "un torneo de benjamines y otros eventos que teníamos preparados". Esta crisis va a afectar económicamente al club y a la localidad, "Grado es un pueblo pequeño, vivimos mucho del mercado, que no sabemos cuándo volverá, y de la hostelería... y vamos a sufrir muchísimo". La presidenta es consciente de que "nos cogió por sorpresa a todos", pero cree que "un club como el Mosconia va a necesitar alguna ayuda para poder salir de esto".

El club suspendió las cuotas de los jugadores de categorías inferiores "en cuanto pasó todo esto. Porque ese mes entrenaron quince días y ni pasamos la cuota".

Esta semana esperan ir conociendo los planes de la RFEF y la RFFPA para finalizar la temporada, "en la reunión todos llegamos más o menos a la misma conclusión, salvo los que están peleando por ascender, que tienen mucho en juego". El Mosconia respalda la medida propuesta por los entes federativos, "no nos parece mal, aunque a nosotros no nos afecta mucho al primer equipo. Cada uno piensa en función de su posición", y al Mosconia le beneficiaría para evitar el descenso del Cadete e Infantil, que seguirían en Segunda, y para certificar el ascenso del Juvenil a Primera.

Con 250 jugadores, repartidos entre sus trece equipos, el Mosconia piensa ya en la próxima temporada, "estamos valorando empezar a hablar con la gente, aunque no pueda ser físicamente, para saber con cuántos nenos contamos para el año que viene".

Los balcones se engalanaron con detalles típicos de la región.
Mónica Fernández también puso un ramo de flores que puso en homenaje a los fallecidos.