El Ribadesella, que jugó casi veinte minutos con dos
hombres menos, aguanta el empate a cero y suma un
valioso punto frente a los ovetenses.

0.-
Ribadesella C.F.:
Óscar Cano, Rojas (Diego, min. 90), Gelu, Sergio, Ramón,
Juanfer, Faus, Chicho, Luismi, Cuanda y Javi (Raúl, min.
61)
0.- C.D.
Vallobín:
Edu, Ramiro (Andrés, min. 90), Tito, Casaprima, Pablo,
Trelles (Juan, min. 90), Gardel (Berredo, min. 78),
Abilio, Nacho, Collar, Abel Piñón.
Árbitro:
Alejandro Pérez Albuerne, de la Delegación del Nalón,
asistido por Celso García Posada y Alex Navia Santos. En
el Ribadesella mostró tarjeta amarilla a Cuanda, Ramón y
Gelu; doble amarilla y la consiguiente expulsión a
Sergio y expulsión por roja directa a Luismi. En el
Vallobín no hubo amonestaciones.
Goles:
Incidencias:
Campo de Oreyana. Sintético. Tarde agradable.
Sesenta espectadores. La segunda parte se jugó con
luz artificial.

Empate sin goles en un
duelo entre dos equipos con objetivos bien diferentes,
donde el Vallobín desaprovechó una buena oportunidad
para sumar tres puntos que le afianzasen en la segunda
posición, puesto que pierde en detrimento del Titánico.
Los riosellanos se sobrepusieron a las expulsiones para
sacar un punto que les mantiene en puestos de descenso.
La primera parte del encuentro estuvo equilibrada
durante los primeros veinte minutos, pero a partir de
ahí el Vallobín se impuso en el dominio del balón y creó
varias ocasiones claras de gol. Tanto Abel Piñón, como
Abilio, Nacho y Collar dispusieron de llegadas en
ventaja en el área riosellana, pero la buena actuación
del meta Óscar Cano impidió que su portería fuese
batida. En la ocasión más clara de todo el partido, en
el 45’, Abel Piñón disparó cruzado eludiendo la estirada
de Óscar Cano, pero el balón salió rozando la base del
poste.
El segundo tiempo había empezado con juego equilibrado,
pero muy pronto, a los seis minutos, Luismi fue
expulsado tras una jugada en la que pareció golpear a un
contrario con el codo en una disputa aérea por el balón.
Eso marcó la segunda parte, ya que los jugadores del
Ribadesella comenzaron a protestar de manera reiterada
las decisiones arbitrales y eso les ocasionó varias
amonestaciones. Así Sergio vio doble tarjeta amarilla de
forma consecutiva tras protestar insistentemente al
colegiado el señalamiento de una falta contra su equipo
y el Ribadesella se vio obligado a jugar los últimos
quince minutos más el añadido con dos jugadores menos.
Paradójicamente el Vallobín, que había creado varias
ocasiones claras de gol contra once jugadores, no supo
atacar con eficacia ante un equipo en inferioridad y
apenas creó ocasiones de gol en esta segunda fase del
partido, llegándose al final de la contienda con el
marcador inalterado.
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