El jugador gijonés expuso que “todos decimos que jugamos donde nos pongan, pero me beneficia más jugar un partido de mediapunta, que cinco en la banda”.

Tras nueve jornadas en el olvido, Pablo Pérez volvió a tener minutos frente al Cádiz. Fueron catorce, que sirven como una pequeña recompensa a su buen hacer en el encuentro de la Copa del Rey ante el Rayo Majadahonda. El gijonés es de los que no se rinde y aunque prefiere hablar sobre el terreno de juego, expuso con muchísima claridad sus pensamientos. Pocas veces ocurre que un jugador hable con tanta soltura y sin tapujos, ha madurado en la sombra y tiene claros sus propósitos. “Todos decimos que jugamos donde nos pongan, pero me beneficia más jugar un partido de mediapunta, que cinco en la banda”, analizó con atino Pablo Pérez.

El jugador reconoce haber tenido una charla con Rubén Baraja para conocer los motivos de caer en un segundo plazo del día a la noche y, aunque no expuso las razones ni la conversación privada, detalló que el vallisoletano “me pidió más trabajo para tener las oportunidades”. Y lo está haciendo. Ahora es su turno y también expone que, si se quiere al mejor Pablo Pérez, el gijonés debe de jugar en su sitio. Algo muy lógico porque como se suele decir: los experimentos con gaseosa. “Estoy contento por volver a tener minutos, por volver a participar y por volver a hacerlo en mi sitio que es donde más puedo ayudar”, aseguró el jugador, reforzado por su buen hacer en el Wanda y en el Ramón de Carranza. Porque Pablo Pérez “volvió a disfrutar jugando”.

Un jugador con excesiva exigencia a sus espaldas

El mediapunta gijonés es uno de esos jugadores que se miran con lupa sus actuaciones, con una exigencia superior al de un futbolista foráneo. Es difícil de explicar ese comportamiento de los aficionados, pero Pablo Pérez lo tiene claro: “Estoy entrenando bien, hice buena pretemporada, intento darlo todo y trato de estar disponible para luchar en todas las oportunidades que pueda tener”. No entra en debates innecesarios, quieren ganarse el respeto a base de buenos minutos.

El jugador expuso además que “ahora por jugar diez minutos bien no eres el mejor y por fallar tres pases tampoco soy malísimo»

Pablo Pérez es de los pocos que se cuentan con la mano que resisten el pulso de salir de la cantera y mantenerse en el primer equipo. Su apuesta por Mareo es clara y ensalza los ejemplos de Nacho Méndez, Pelayo Morilla o Dani Martín antes de reivindicar que “este club tiene que apostar por la cantera».

Traver y Noblejas no completan la sesión

Por otra parte, Blackman sigue sin entrenarse con el grupo un día más y Traver y Noblejas se retiraron de la sesión antes de tiempo. Mañana, el entrenamiento en Mareo será a puerta cerrada.