Mossa no se ejercitó con el grupo, mientras que Héctor Verdés y Linares se retiraron antes por precaución.

El Oviedo ya trabaja con la mente puesta en el partido del viernes (Carlos Tartiere - 21:00 h.) ante el Barcelona "B". La plantilla realizó ayer el entrenamiento regenerativo, tras la derrota en Zaragoza (2-1), y hoy Anquela dividió al equipo en dos grupos, en una mañana gélida con apenas 1º y brisa muy fría.

En el campo nº 5 se ejercitaron los titulares en La Romareda -a excepción de Mossa y Alfonso Herrero- y realizaron trabajo físico a las órdenes del readaptador Ignacio Gonzalo, con y sin balón, para finalizar con un partidillo de fútbol-tenis para finalizar. Linares se retiró antes que sus compañeros, por precaución.

En el campo nº 4 trabajaron los jugadores con menos minutos, el juvenil Francis, y los jugadores del filial Asier, Carlos Cano y Viti Rozada. El preparador físico, Marcos Marcén, llevó el peso de la sesión, bajo la atenta mirada de Anquela y sus auxiliares. Realizaron ejercicios con y sin balón, finalizando con un partidillo a lo ancho. Héctor Verdés se retiró primero por precaución.

Olmes García y Mossa no se ejercitaron junto a sus compañeros, aunque la presencia del lateral valenciano no peligra en principio para el viernes, y los porteros trabajaron al margen de los jugadores de campo.

El primer equipo azul volverá a los entrenamientos mañana a las 10.30 horas en El Requexón.

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