Los de Anquela lograron su primer triunfo a domicilio remontando en una buena segunda parte a un Nástic de Tarragona que reculó tras adelantarse en el marcador. El colegiado señaló tres penaltis.

1						-		2
Gimnástic de Tarragona							Real Oviedo
Nº	Jugadores	A	R	C	G	P	Nº	Jugadores	A	R	C	G	P
1	Dimitrievski	92'				2	13	Juan Carlos					2
18	Suzuki	92'				2	20	Cotugno					2
4	Xavi Molina					2	6	Carlos Hernández	26'88'	88'		72'	2
16	Bruno Perone					2	18	Christian Fernández					2
22	Abraham Minero					2	23	Mossa	38'				3
14	Maikel Mesa			83'		2	5	Forlín			63'		3
5	Gaztañaga	58'				3	8	Ramón Folch					1
23	Sergio Tejera			71'		3	15	Mariga					3
7	Juan Delgado			68'		2	7	Aarón Ñíguez				94'	2
8	Uche					3	10	Linares	41'		90'		3
11	Manu Barreiro				39'	3	21	Saúl Berjón	9'		87'		1
BANQUILLO							BANQUILLO
31	Bernabé (P.S.)						1	Alfonso Herrero (P.S.)
3	Javi Jiménez			68'		2	3	Varela
6	Zahibo			71'		2	11	Pucko			63'		1
10	Muñiz						14	Yeboah			87'		s.c.
12	Jean Luc			83'		s.c.	19	Valentini			90'		s.c.
19	Dongou						22	David Rocha
35	Pol Valentín						33	Owusu
ENTRENADOR							ENTRENADOR
Rodri							Anquela
Goles:		1-0 m. 39 Manu Barreiro (p.); 1-1 m. 72 Carlos Hernández; 1-2 m. 94 Aarón Ñíguez (p.).
Árbitro:		Pizarro Gómez, asistido por Maldonado Urbina y García González. Comité madrileño. (2)
Incidencias:		Nou Estadi. Terreno de juego en buen estado. 5.927 espectadores, con casi un centenar de aficionados oviedistas.

El Oviedo ya gana a domicilio. Y repitió victoria, por segunda semana consecutiva, nuevamente remontando, tras un primer tiempo gris para los dos equipos, en los que dispusieron de una pena máxima cada uno. Berjón falló y el Nástic acertó, por lo que se marchó con ventaja al descanso, que fue el punto de inflexión para un Oviedo que sacó la garra y la ambición para terminar volteando el partido con un riguroso penalti por una caída de Mossa y que transformó con suspense Aarón Ñíguez.

Anquela repitió sistema y once inicial, a excepción del internacional Diegui Johannesson, que fue reemplazado por el uruguayo Cotugno. Forlín formó parte del trivote con Mariga y Ramón Folch, y además fue uno de los que mejor rendimiento aportó hasta que fue sustituido.

El primer tiempo estuvo muy disputado, con una dura batalla en la medular y sin un dominador claro. Los remates de Uche y Linares, sin consecuencia alguna, precedieron al primer penalti de la tarde, por derribo sobre Carlos Hernández dentro del área cuando un defensa se disponía a despejar un balón. Penalti claro que ejecutó Saúl Berjón y que lanzó por encima del travesaño.

El máximo castigo se repitió minutos después en el área contraria. Mossa protegía un balón para Juan Carlos cuando llegó Uche y el lateral le obstruyó dentro del área, señalando el colegiado el correspondiente penalti. Manu Barreiro no falló y adelantó al Nástic con un toque sutil, raso y centrado.

Se llegó al descanso con derrota nuevamente por un detalle, como ya ocurriera en partidos anteriores. El segundo acto comenzó sin sustituciones, aunque con cambio de sistema. Forlín retrasó su posición al eje de la zaga y Berjón acompañó a Linares en la punta de ataque.

El Oviedo dio un paso adelante en la reanudación y pasó a dominar el partido, frente a un Nástic conservón, que se echó atrás en exceso y lo terminó pagando. Linares, muy activo, aunque sin fortuna en el remate, lo intentó en varias ocasiones, la más clara en el 56' con un remate que desvió el meta local a córner.

Un duro encontronazo entre Forlín y Manu Barreiro, tras una disputa aérea, terminó con el oviedista sustituido, tras llevarse un fuerte golpe en la parte frontal del cráneo, posiblemente conmocionado por el choque con el atacante granota. Pucko entró en su lugar

Los azules iban mejorando a medida que avanzaban los minutos y las llegadas al área local se sucedían, aunque Uche pudo sentenciar el partido en el 68'. El ariete se revolvió en el área y sacó un remate que salió cerca de la cepa del poste derecho de Juan Carlos, tras un buen servicio de Tejera. La réplica oviedista llegó un minuto después, con un taconazo de Linares en el primer palo en un saque de esquina, que blocó el meta local.

El empate llegó tras un saque de esquina botado en corto, que cabeceó Carlos Hernández, libre de marca, en el corazón del área.

Los dos equipos parecían conformarse con el empate y la prudencia imperaba en ambos bandos. Carlos Hernández fue expulsado por doble amonestación, tras interceptar el balón con la mano en la frontal del área. Anquela dio entrada a Valentini por Linares para conservar el resultado, pero en el minuto 92, una internada por la izquierda de Mossa termina con el ex-jugador del Nástic en el suelo dentro del área, tras un forcejeo con Suzuki. El colegiado señaló la pena máxima y Aarón Ñíguez, con un disparo mordido, superó a Dimitrievski para anotar el gol de la victoria.

Triunfo que hace justicia a la buena segunda parte de los de Anquela, que encadenan, por primera vez esta temporada, dos victorias consecutivas. El Oviedo se medirá el sábado al Valladolid en el Nuevo Zorrilla (18:00 horas), con el objetivo de seguir escalando puestos en la clasificación. Los azules terminan al jornada a tiro de la sexta plaza, que da derecho a jugar la promoción de ascenso, dejando a siete puntos la zona caliente del descenso que ahora marca el Lorca.