El Oviedo recibe mañana al Lugo en el Carlos Tartiere (12:00 h.) con la baja de Toché. Forlín es la única novedad en el once y Anquela podría cambiar de sistema.

El Real Oviedo completó esta mañana en el Requexón el último entrenamiento antes de recibir mañana al Lugo en el Carlos Tartiere. Un partido que, a pesar de haber transcurrido únicamente un tercio de liga, tiene mucha importancia para un Oviedo que busca un punto de inflexión y poner fin a las malas sensaciones que transmite el equipo, que involuciona a medida que pasan las jornadas y está lejos, por el momento, del objetivo inicial.

Los azules son decimoquintos con catorce puntos, a seis de la promoción y a nueve del Lugo, líder en solitario de la categoría, que está teniendo un brillante inicio de liga, fundamentado en la solidez defensiva que prueba que sólo hayan encajado nueve goles en doce partidos.

La baja de Toché que, como mínimo, se perderá los dos próximos meses de competición, deja toda la responsabilidad del ataque a Linares, que no marca en liga desde mayo y tratará de resarcirse ante el líder. Forlín es la única novedad en la lista sustituyendo al lesionado Toché, que se une a la enfermería en la que siguen Fabbrini, Toché, Hidi, Héctor Verdés y Viti.

Anquela dejó fuera de la lista únicamente a Varela por decisión técnica. El técnico jienense sigue buscando soluciones para dar con la tecla y esta semana ensayó con un 1-3-3-3-1 que podría poner en liza el domingo y que estaría formado por Juan Carlos; Valentini, Carlos Hernández, Christian Fernández; Diegui, Ramón Folch, Mossa; Aarón Ñíguez, Mariga, Saúl Berjón; Linares. En el banquillo estarían: Alfonso Herrero (P.S.), Cotugno, Forlín, Pucko, David Rocha, Yeboah y Owusu.

Los convocados se concentrarán a las 20:30 horas en el Hotel Ayre hasta los prolegómenos del partido.

El encuentro será retransmitido por LaLiga123TV y lo dirigirá el vasco Sagués Oscoz.

El rival: C.D. Lugo

El conjunto lucense está siendo la revelación en este inicio liguero, a pesar de los numerosos cambios que sufrió el equipo. El primero en la banqueta, donde Francisco sustituye a Luis César, que fichó por el Valladolid tras una buena temporada.

La plantilla cambió más de la mitad y cuenta con dos caras conocidas para el fútbol asturiano. El ex-sportinguista Guille Donoso y el central ex-oviedista Josete. Las bajas más importantes fueron, entre otras, las de sus delanteros Caballero (Almería) y el pichichi Joselu (Granada). Iriome, con tres goles, es el máximo goleador de un Lugo que está optimizando sus tantos a favor, ya que solo lleva doce.

Francisco no podrá contar con los lesionados Eduard Campabadal, Iriome, Adrià Carmona y Sergio Gil para visitar el Carlos Tartiere.