Los azules mostraron la peor imagen de la temporada y pudieron salir goleados por un Granada que marcó al comienzo de cada período. El Oviedo apenas generó en ataque.

El Oviedo cuajó su peor partido de la temporada en Los Cármenes. Los azules encajaron un gol al comienzo de cara periodo y no consiguieron crear ocasiones en ataque, en el primer partido que terminan sin marcar.

Anquela hizo dos cambios respecto al equipo que empató con el Zaragoza (2-2) el pasado miércoles. El lesionado Héctor Verdés y Mossa, por decisión técnica, dejaban su sitio a Valentini y Christian Fernández. El técnico oviedista repitió su apuesta por el 4-3-3, que en esta ocasión no dio buen resultado.

El partido no pudo empezar peor para los azules. Christian Fernández cabeceó el balón al fondo de su propia portería un saque de esquina. El Oviedo reaccionó bien y tuvo el control del encuentro ante un Granada que plegó sus líneas y buscaba la contra para sentenciar el encuentro, aunque sin volver a acechar la portería de Juan Carlos. Toché pudo empatar el partido en el minuto 10, en un saque de esquina que cabeceó desde el segundo palo, pero Javi Varas desvió su remate a córner. Esta fue la única ocasión de un Oviedo sin ideas, ni desborde, que no supo transformar su control en ocasiones, ante un Granada bien plantado.

Si había cualquier atisbo de esperanza para la segunda parte se vino al traste en el primer minuto, tras un centro raso desde la derecha de Baena, entre la espalda de la defensa y Juan Carlos, al que se anticipa Joselu ante la mirada de Valentini, que no estuvo acertado en la marca.

Anquela buscó un revulsivo con la entrada de Diegui y Linares. El técnico volvió a retirar a Valentini, que no consiguió acabar hasta la fecha ninguno de sus dos partidos jugados como titular, y a Forlín, que pasó desapercibido en la medular, al igual que sus dos compañeros. Pasó a jugar con dos delanteros pero el Oviedo no llegó, ni si quiera, a las inmediaciones del área nazarí, todo lo contrario del Granada, que aprovechó los espacios para generar mucho peligro, aunque sin acierto en la definición. En el minuto 59 pudo sentenciar Espinosa, con un cabezazo en plancha en el segundo palo, libre de marca, tras un centro de Machís desde la izquierda, que fue un auténtico quebradero para la zaga carbayona, muy desacertada en la tarde de hoy.

Con la entrada de Mossa por Berjón, el Oviedo pasó a jugar con el valenciano como carrilero por la izquierda, pero no generó peligro hasta los minutos finales, y más por empuje que por juego, ya que salvo alguna acción aislada de Aarón Ñíguez o Toché, no hubo ningún peligro para Javi Vara, que tuvo su segunda intervención de la tarde en el 90, tras una volea de Carlos Hernández, desde la frontal, a centro de Mossa. Previamente pudo ampliar la cuenta Machís hasta en tres ocasiones, una la envió alto a pase de Machís, en la segunda apareció Juan Carlos para enviar el balón a córner y la tercera la envió a la parte interior del poste, saliendo desviada, tras un error en el despeje de Cotugno.

Mala imagen del Oviedo en líneas generales, en un partido donde adoleció de argumentos ofensivos para inquietar la portería de un seguro Javi Varas, que intervino con acierto en dos ocasiones a lo largo de todo el partido. Los azules volverán al trabajo el martes a las 18:00 horas en el Requexón, con la vista puesta en el partido del domingo ante el Córdoba (Carlos Tartiere - 12:00 h.), un encuentro importante para los de Anquela, a pesar de tratarse de la jornada 10, por los últimos resultados, que sitúan al equipo en la zona baja de la tabla, después de cinco jornadas sin ganar.