Keko, que arrastró molestias durante la semana, entra en la convocatoria de la que se cae Mendi, por sanción. Los maliayos tratarán de dar la sorpresa al filial pucelano, quinto clasificado.

Tras un bache de seis derrotas consecutivas, el triunfo ante el Burgos (2-1) y el empate en Estella (1-1) dan confianza al Lealtad para el tramo final de liga en el que esperan no pasar apuros para cerrar la permanencia, que tienen al alcance de la mano. Los maliayos son décimos con cuarenta puntos, seis menos que su próximo rival, que ocupa la quinta posición. Y es que este año hay muchos equipos con opciones de jugar la Copa del Rey al estar dos filiales en las cinco primeras posiciones, puestos a los que podría aspirar el Lealtad si tiene un final de la segunda vuelta como hizo en la primera.

Roberto Aguirre tiene las bajas de los lesionados de larga duración Iván Garrido y Juan Cueto, además del sancionado Mendi, que cumplirá ciclo de amonestaciones. Keko entra en la convocatoria finalmente, aunque su participación parece complicada. El once inicial podría ser el formado por Javi Porrón; Omar Hernández, Alberto González, Álex Blanco, Álex Belda; Adrián Llano, Álvaro Muñiz; Jandrín, Yosu, Rubén Sánchez; David Grande. En el banquillo estarían: José Luis (P.S.), Keko, Agus Porto, Cris Montes, Robert y Valdo.

La expedición partirá a las 16:00 h. de Les Caleyes y pernoctará en el Hotel Ruta de Duero, a las fueras de Valladolid.

El encuentro arrancará mañana a las 12:00 h. en el Anexo de Zorrilla con el arbitraje del vasco González Esteban, protagonista de un polémico arbitraje en el único partido que dirigió esta temporada a los negrillos: Lealtad 0-1 Racing de Santander.

El rival: Real Valladolid "B"

El filial pucelano acude en cuadro al choque, ante las bajas de Mario y Rai, por sanción, y de Iván y Arroyo, por lesión. El técnico, Rubén Albés, cuenta con tan sólo 12 futbolistas de su equipo y tendrá que esperar a esta tarde para convocar a cuatro jugadores del Juvenil "A", tras el partido que disputará en Majadahonda.

El Valladolid "B" tiene asegurada la permanencia y, con ocho puntos de desventaja sobre el Pontevedra, muy complicado alcanzar un puesto de promoción de ascenso a Segunda, donde tampoco está claro que pudiera ascender al estar el primer equipo.